Docentes

Desde su llegada al poder las declaraciones de la ministra Aguirre vienen produciéndome a la vez horror e indignación. Sin embargo, las aparecidas en su periódico, en respuesta a la entrevista de Carlos Arroyo han desatado mi instinto profesional, así que veamos si consigo informar, en algún punto al menos, a mi desinformada ministra.1. No conozco ningún centro en que se impartan asignaturas, como las que menciona la señora Aguirre (manicura, iniciación a la gramática del pop y el mundo de los dinosaurios) y, desde luego, no figuran en el currículo de la ESO ni de los nuevos bachilleratos como materias obligatorias. Si realmente se imparten en algún centro se deberá exclusivamente a que el inspector de turno ha considerado oportuno aceptarlas; la señora ministra debería vigilar, pues, a sus inspectores; pero si quiere ser justa debería dar previamente medios a todos los centros para que puedan ofrecer a sus alumnos optativas interesantes. Quizá la señora ministra ignore que las propuestas de asignaturas optativas presentadas por los directores se suelen aceptar o no por la inspección teniendo en cuenta básicamente si hay profesorado en el centro que las pueda impartir y aulas suficientes (aunque yo, que soy docente, creo en el buen sentido de mis colegas al proponerlas y también en el de los inspectores al aceptarlas).

2. El Estado, o mejor dicho la LOGSE en sus DCB de cada asignatura, ya establece los conocimientos mínimos de todos los españoles.

3. Creo que sería sensato por parte de la señora ministra leer algo más antes de hacer declaraciones, incluso si necesita que alguien le traduzca esa jerga burocrática en la que tan perdida parece hallarse.

En todo caso felicito a la señora ministra por estar tan encantada de no ser docente. Yo también me felicito de que no lo sea.