Los niños de la enseñanza pública

El pasado lunes 2 de diciembre se publicó en su periódico una entrevista con doña Esperanza Aguirre, y escribo esta carta para expresar mi más profundo malestar e indignación por sus declaraciones.Tengo 16 años, estudio en un centro público, y según la señora ministra fui una de esas "niñas inconscientes" manipulada por un sindicato de estudiantes que me lanzó a la huelga para que pasara un rato divertido. Afortunadamente, no hay cosa más alejada de la realidad. Si aquel día no asistí a clase lo hice por defender una serie de derechos y convicciones que tanto yo como los demás estudiantes conocemos bastante mejor de lo que muchos creen, incluso me atrevería a decir que de lo que muchos desean.

Fuimos a la huelga (que no nos mandaron) porque creemos que la educación no se puede convertir en un negocio regido por las leyes del mercado. Defendemos un modelo público y equitativo que dé las mismas oportunidades a todos los españoles, y nos negamos a que se nos manipule con palabras huecas sobre democracia y libertad. Si ustedes a los 16 años eran unos niños que no se interesaban por la política ni luchaban por lo que ahora tanto defienden (cosa por la que merecía la pena en su época no ir a clase de vez en cuando), no piensen que todos han sido y son así. Principalmente porque hay mucha gente que no se puede permitir el lujo de ser un "niño" sin responsabilidades hasta los 30 años.

Dice que no le aterra la palabra "privatizar"; sin embargo, hay muchos hijos de familias con pocos recursos que no opinan lo mismo. Intente la laboriosa tarea de averiguar por qué. Aunque sólo sea para responder a unos "niños" que creen que ser ministra es algo más que decir cuatro palabras para contentar a algunos y poner una bonita sonrisa ante las cámaras.-