Las manifestaciones diarias de Belgrado adquieren proporciones de revuelta cívica

Las diarias manifestaciones de protesta contra Slobodan Milosevic comienzan a adquirir el carácter de una revuelta cívica en Belgrado y en otras ciudades de Serbia. Estudiantes, activistas de la oposición y decenas de miles de ciudadanos serbios marcharon ayer bajo el frío viento que soplaba en Belgrado, a pesar de que el presidente ha dado sobradas muestras de que no tiene intención de ceder ante sus demandas de democracia y derechos civiles. Por 17 días consecutivos, grandes masas de gente ocuparon el centro de la ciudad, gritando consignas a favor de la democracia y cantando en apoyo de una estación de radio independiente que las autoridades neocomunistas de Serbia cerraron el martes.

Al frente de la manifestación se encontraba un grupo de chicas que llevaba barras de pan, símbolo de amistad y buena voluntad en Serbia. "Debemos de intentarlo y ganar esta batalla por nuestro futuro, porque de lo contrario nuestro país se enfrenta a años de oscuridad", afirmó Gordana Tadic, una estudiante de Ciencias.Más de 50.000 personas protestaron en Belgrado, mientras Milosevic hizo su primera concesión al destituir al líder del gobernante Partido Socialista Serbio (SPS) en la ciudad de Nis, Mile Ilic, después de que el bloque Unidos le acusara de fraude electoral. Antes un tribunal de Belgrado rechazó la demanda de la oposición sobre que el SPS ha convertido su, victoria en una estafa al cancelar los resultados de las municipales en la capital el mes pasado.

Las autoridades mostraron su mayor actitud represiva el domingo pasado cuando el presidente del Parlamento serbio, Dragan Tomic, apareció en televisión para denunciar las manifestaciones diarias como "destructivas, violentas y con todas las características de los grupos e ideologías pro fascistas". El pasado martes, las autoridades cerraron la emisora de radio B 92, que ha emitido extensas informaciones sobre las protestas, en contra de lo que hacen los medios gubernamentales.

Milosevic no ha hecho comentarios públicos sobre la crisis, pero ha permitido que la televisión le filmara depositando su voto en las nuevas elecciones municipales que la oposición denuncia como una farsa. Aunque no ha ordenado el uso de la fuerza contra los manifestantes, cientos de policías de otras ciudades han sido traídos a Belgrado y varios activistas de la oposición han sido detenidos.

Con la oposición dando señales de que se le acaban las ideas de cómo expandir su protestas para poner al Gobierno en situación límite, algunas brechas han aparecido en su sistema de poder autoritario y monolítico. Cinco jueces del Supremo rompieron filas el martes y criticaron a sus colegas por aprobar la anulación de la victoria electoral de la oposición.

EE UU ha recibido garantías de que el régimen de Milosevic no utilizará la fuerza para reprimir las manifestaciones callejeras de la oposición, infórmó ayer Nicholas Burns, portavoz del departamento de Estado. Según Burns, esas garantías le fueron transmitidas al vicesecretario de Estado Strobe Talbott por el ministro yugoslavo de Exteriores, Milan Milutinovic, durante una entrevista personal en Londres. Talbott replicó que los norteamericanos juzgarán al Gobierno serbio "por sus acciones y no por sus promesas", informa Javier Valenzuela.