"Nuestro objetivo es acabar con el poder arbitrario de Milosevic"

Vuk Draskovic es el líder de la coalición Unidos (Sajedno) que ha organizado las manifestaciones masivas en Belgrado durante las dos últimas semanas y que será el candidato presidencial frente al presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, en las próximas elecciones.Pregunta. ¿Milosevic no ha arremetido contra las manifestaciones callejeras hasta ahora por la presión occidental?

Respuesta. No veo ningún indicio de que Occidente presione seriamente a Milosevic. Por desgracia, Occidente sigue viendo en él de algún modo una fuerza en favor de la paz y la estabilidad en la región debido a su implicación en los acuerdos de Dayton. Eso es una completa equivocación. El mismo hombre que desencadenó la guerra en Bosnia con sus ideas de limpieza étnica está dispuesto, incluso ahora a utilizar una estrategia parecida de división y odio para llevar la tragedia a su propio país. Nosotros somos proeuropeos y proestadounidenses porque perseguimos los mismos ideales de democracia, economía de mercado y estilo de vida. Somos un movimiento en favor de Europa. Milosevic se opone diametralmente a esto. No está en favor de Dayton, está manipulando a Occidente para intentar mantenerse en el poder. Es un gran error confiar en él para la paz.

P. Usted ha protestado contra la limpieza étnica y ha padecido por ello. Pero Zoran Dindic, que encabeza el Partido Democrático y que es el otro líder principal de la coalición Unidos, ha apoyado abiertamente a Radovan Karadzic, el líder serbobosnio acusado de crímenes de guerra.

R: Eso fue en el pasado. Para él fue un movimiento político pragmático en aquel momento.

P. ¿Así que es erróneo que si cae Milosevic los acuerdos de Dayton serán papel mojado?

R. Completamente. Nuestro apoyo a Dayton no es un medio para mantenemos en el poder, sino un medio para lograr la paz en los Balcanes. No puedo creer que los Gobiernos de EE UU y los países europeos deseen realmente apoyar un renacimiento del estalinismo en los Balcanes, que es lo que está intentando conseguir la mujer de Milosevic. Pero eso es lo que, al final, tendrán con Milosevic.

P. ¿Cuál es el objetivo último de las manifestaciones?

R. El objetivo es acabar con el poder arbitrario de Milosevic. Mostrar a la sociedad en su conjunto que podemos arrebatar nuestro destino a los bolcheviques. Nuestra continua presión en las calles obtuvo una gran victoria cuando cinco jueces afirmaron que habían sido sometidos a una increíble presión por parte de Milosevic para anular los claros resultados de las elecciones. Miles y miles de trabajadores han declararado que se unirán a nosotros, a pesar de los intentos del Gobierno para bloquearles en las fábricas. Pero como demuestra la experiencia checa de hace unos años, esa clase de táctica no sirve.

P: ¿Cuáles son sus condiciones para poner fin a las manifestaciones?

R: Milosevic tiene ahora dos opciones. La primera es reconocer los resultados electorales del 17 de noviembre , liberalizar los medios de comunicación estatales y revocar el cierre de la cadena de radio independiente B92 y de una radio estudiantil. En ese caso, pediremos el fin de las manifestaciones y comenzaremos a prepararnos para las elecciones parlamentarias y presidenciales de Serbia. Pero si Milosevic persiste en sus actos de ilegalidad y terrorismo de Estado, continuaremos las manifestaciones hasta conseguir su dimisión.

P: ¿Qué efectos tendrá el cierre de la estación de radio B92?

R: Ahora nos enfrentamos a la total oscuridad informativa. La única forma de informar a la gente es mediante el boca a boca y la distribución de panfletos y pósters sobre nuestras manifestaciones.

P: Milosevic es un superviviente político muy astuto. ¿Qué cree que hará al final? ¿Cederá o se vendrá abajo?

R: Milosevic es un cobarde arrogante. Hasta ahora ha sentido una presión muy fuerte y pacífica desde el interior. Pero no ha sentido la presión de Occidente. Si se enfrenta a esa presión, cederá. A largo plazo, soy optimista. Milosevíc no puede protegerse eternamente de millones de personas de su propio pueblo.