"La OTAN no puede quedarse siempre en Bosnia", advierte el general Zorzo

El general Javier Zorzo, de 55 años, viajará el jueves a Bosnia para ponerse al frente de la Brigada Almería (Spabri III), nombre de la nueva agrupación española de la Fuerza de Paz de la OTAN. Hace ahora cuatro años, en noviembre 1992, el entonces coronel ya viajó a la antigua Yugoslavia al mando de] primer contingente español enviado a la zona. "La gran tarea de los próximos 18 meses será estabilizar la paz, porque las tropas de la OTAN no pueden quedarse para siempre en Bosnia" afirma Zorzo.

"La situación actual es radicalmente distinta a la que encontramos entonces. En 1992 había una guerra y ahora hay una paz acordada, más o menos inestable", explica.Desde que regresó de Bosnia, en abril de 1993, Zorzo no ha perdido contacto con el conflicto. De enero a octubre de este año ha estado en Nápoles (Italia), como enlace ante el mando de la OTAN para Bosnia, lo que le obligaba a visitar regularmente la región. Es el militar español que mejor conoce la guerra de los Balcanes, quizá el único que la ha seguido de cerca desde sus inicios.

"Desearía poder asegurar que la paz es irreversible", contesta. "Y es cierto que les costaría trabajo volver a una guerra generalizada. Tendrían que recoger las armas que ahora están bajo control de la OTAN y eso nos daría al menos un preaviso. Pero no podemos descartar estallidos, especialmente de carácter localizado".

Recientemente ha sido nombrado jefe de la Brigada Legionaria Alfonso XIII, que aporta el grueso de las tropas para la nueva operación en Bosnia y también, para la de momento frustrada intervención en Zaire. No ha tenido tiempo de deshacer las maletas a su regreso de Nápoles y ya las está preparando de nuevo. Lo mismo le ocurrió hace cuatro años, cuando tuvo que dejar su despacho en el Ministerio de Defensa para dirigir el Tercio de la Legión de Ronda (Málaga), que se integró en la ahora denostada misión de la ONU para Bosnia (Unprofor).

Defensa de Unprofor

"Unprofor no fue tan ineficaz. Sin ella, las consecuencias de la guerra habrían sido mucho más dramáticas. Lo que pasa es que la OTAN tiene un mandato, mucho más claro y todo el mundo sabe lo que puede pasar si no se cumplen los acuerdos. Eso ha dado una sensación de firmeza que Unprofor no tenía. Su misión era la ayuda humanitaria. Nunca hubo una presión sobre las partes para que dejasen de guerrear bajo amenaza de intervención. Unprofor tuvo el éxito relativo que correspondía a su mandato".A partir del 20 de diciembre, la fuerza de aplicación del plan de paz (Ifor) se transformará en fuerza de estabilización (Sfor) y sus efectivos se reducirán de 55.000 a unos 25.000. También el contingente español será más reducido: 1.200 miembros en total frente a los 1.800 actuales.

A cambio, un batallón extranjero, posiblemente ucranio; podría desplegarse en la zona española, bajo control táctico de Zorzo. Además, la permanencia de la agrupación en Bosnia se limitará a cuatro meses, en vez de seis como hasta ahora, pero eliminando los permisos, que obligan a que una sexta parte del contingente esté siempre de permiso.

El gran reto para 1997 son las elecciones municipales, previstas para la primavera: "Lo ideal sería que las municipales las organizara el Gobierno bosnio, con apoyo de las organizaciones internacionales. Si se consiguiera que los resultados fueran aceptados por las partes, sería una pasó de gigante".

La OTAN no tiene previsto perseguirá los criminales de guerra, sino sólo detenerlos si se tropieza con ellos. "Sería una dificultad muy grande para la permanencia de las tropas que se nos diera esa misión. No somos policías, somos militares. Si hubiera que hacerlo, sería con un mandato especial y en apoyo a la policía de la ONU, porque no estamos capacitados para llevar a cabo esa tarea", concluye.