PP vuelve a dejar a Cajamadrid fuera del contrato de los tributos

Cajamadrid, entidad presidida por Miguel Blesa, consejero del Partido Popular y amigo personal de José María Aznar, ha vuelto a quedar fuera del supercontrato de los tributos regionales. El gobierno madrileño, presidido por Alberto Ruiz-Gallardón, decidió adjudicar ayer, por segunda vez, el servicio de cobro de impuestos a los bancos Santander y Central Hispano por los tres próximos años.

Seis grandes entidades bancarías presentaron sus ofertas para recaudar los impuestos del juego, transmisiones patrimoniales y sucesiones en la Comunidad. Por estos tributos, la hacienda regional ingresa anualmente más de 130.000 millones. La consejería de Hacienda falló a favor del Banco de Santander y del Banco Central Hispano, los mismos que ganaron el primer concurso convocado en febrero pasado para este fin.En aquella ocasión, la izquierda regional acusó, a Ruiz-Gallardón de favorecer al Banco de Santander porque su presidente, Emilio Botín, había pedido al voto para el PP. Cajamadrid también se quejó y amenazó con eliminar las subvenciones millonarias que regalaba a la administración regional. Ahora, ha vuelto a perder pues su oferta era inferior a la del BCH y Santander (véase gráfico).

Cautela

Juan Antonio Candil, portavoz de IU, opinó ayer con cautela sobre esta adjudicación: "Tenemos que analizar toda la información sobre las ofertas planteadas. "Estudiaremos si ha habido automatismo en la concesión pues los adjudicatarios son los mismos que se lo llevaron el año pasado. Los dos bancos hicieron una inversión para prestar este servicio y hubiera resultado enormemente extraño que se le hubiera concedido sólo para este año".El portavoz del PP, Manuel Cobo, declaró: "A mi me hubiera gustado que Cajamadrid hiciera una gran oferta y fuera la adjudicataria. Pero desconozco las razones que han motivado su oferta aunque supongo que estarán fundamentadas".Jaime Lissavetzky, portavoz socialista, señaló: "Lo razonable es que las cajas de ahorro regionales gestionen los tributos cedidos. Sería llamativo que en Cataluña, La Caixa no lo hiciera. La decisión llega justo antes de que Cajamadrid discuta si concede 1.200 millones a la Comunidad para el salario social. A lo mejor ya no la dan".