El secuestro obstaculiza el proceso de acercamiento de presos, según Interior

El secuestro de Cosme Delclaux obstaculiza el acercamiento de presos de ETA iniciado el pasado verano, según fuentes de Interior. Este departamento tenía en estudio la posibilidad de hacer un "gesto", consistente en el traslado a la Península de varios presos de la cárcel canaria de Salto del Negro antes de Navidades, pero esta operación quedará aplazada. El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, reconoció que el secuestro supondrá un frenazo al proceso de acercamiento. Sin embargo, el ministro Jaime Mayor Oreja declaró ayer que "no habrá nada que cambie la estrategia diseñada desde el Gobierno".

Mayor defendió una estrategia antiterrorista basada en el. estricto cumplimiento de la ley, sin contemplar la posibilidad de dialogar con ETA mientras ésta no cese sus actividades criminales. En el pasado "han existido demasiadas tomas de temperatura" y "contactos sin transparencia" que no han servido para nada, en opinión del ministro.En una conferencia pronunciada en el Aula Francisco Tomás y Valiente, de la Universidad Autónoma de Madrid, el responsable de Interior indicó que este secuestro es un ejemplo del proceso de degeneración de ETA, que recurre a prácticas mafiosas como hacer rehén al hijo del empresario Álvaro Delclaux, que es a quien pretende extorsionar.

"Yo siempre he dicho que las políticas hay que mantenerlas antes y después de los atentados", señaló Mayor, tras proclamar que "no habrá nada que cambie la estrategia diseñada por el Gobierno" en materia penitenciaria. Pero fuentes de Interior reconocen que en este momento, con Cosme Delclaux y José Antonio Ortega Lara secuestrados, "sería muy difícil de explicar a la sociedad" cualquier gesto de generosidad hacia los presos de ETA.

Ricardo Martí Fluxà, viceministro de Seguridad, dijo a su vez que el Gobierno ya ha demostrado su "buena voluntad" respecto a los presos de ETA, pero que ahora "no es el momento más idóneo" para hablar de sus derechos.

ETA se atribuyó en un comunicado enviado ayer tarde a los diarios Egin y Euskaldunon Egunkaria los nueve últimos atentados perpetrados entre el 28 de agosto y el 1 de noviembre. En el texto no se menciona el secuestro del abogado Delclaux.

Coche bomba

Entre los atentados están las bombas colocadas en los palacios de Justicia de Vitoria, Pamplona y San Sebastián el 19 de octubre, así como los artefactos que estallaron el 2 de noviembre en el palacio de Justicia de Gijón (Asturias) y en la farmacia del marido de la ex secretaria de Estado. de Asuntos Penitenciarios Paz Fernández Felgueroso. También se cita el coche bomba contra el cuartel de la Guardia Civil de Buñuel (Navarra), el 1 de noviembre.

El Ministerio de Interior y el Gobierno vasco se han comprometido a realizar coordinadamente las investigaciones sobre el secuestro. Pare ello, habrá reuniones semanales entre los mandos de la Ertzaintza y los de la Guardia Civil. La inspección del coche de Cosme Delclaux, hallado el miércoles en Zamudio, finalizó sin que se encontraran restos de narcóticos u otras pistas. La policía sospecha que el secuestro es obra del comando Vizcaya, reconstituido tras varios años de intentos infructuosos.

La policía ha confirmado que datos sobre la familia Delclaux figuraban en numerosos documentos incautados a ETA en los últimos años. El último, a Julián Atxurra, Pototo, detenido en Francia el pasado verano. Una anotación incautada en 1987 a Santiago Arróspide, Santi Potros, proponía: "Al ser muchos de sus negocios de tipo familiar, habría que involucrar al clan y pedir el rescate a toda la familia".