González Seara: "En Europa es mucho más lo que une que lo que separa"

Luis González Seara (La Merca, Orense, 1936) tardó doce años en escribir El poder y la palabra (Tecnos). Lo único que lamenta es no haber sido capaz de explicar todas sus ideas sobre los valores culturales que predominan en Europa y el poso común que une a las naciones europeas en menos de las mil páginas que tiene el libro. Ayer, el sociólogo y experto en comunicación recibió por dicha obra el Premio Nacional de Ensayo, que otorga el Ministerio de Educación y Cultura. "En Europa es mucho más lo que nos une que lo que nos separa", reflexiona González Seara, catedrático de Sociología, ex diputado y ex ministro con UCD.

El poder y la palabra, que fue presentada en junio del año pasado por Adolfo Suárez, se estructura en dos hilos conductores. Por una parte, la historia de Europa y su libertad y, por otra, la idea de que esta misma Europa es. anterior a las naciones que hoy la constituyen. González Seara se quedó ayer sin poder asistir al almuerzo que tenía previsto en el Club Financiero de Madrid. En ese tiempo atendió a periodistas y fotógrafos. Según la tesis sostenida por González Seara en la obra ganadora, la confrontación que se ha producido en Europa entre lo que llama realismo político -"el poder en función de la razón de Estado"- y la utopía sobre el ideal de lo que tiene que ser un Gobierno, "triunfa esta idea de la libertad, el valor de la democracia y la tolerancia, de los derechos de los individuos y de la necesidad del control del poder". González Seara afirma que este triunfo se da en todos los órdenes de la vida, desde el económico -"la libertad de mercado"-, hasta el jurídico y los del campo de las artes, la literatura y la filosofía.La segunda tesis de la obra galardonada con el Nacional de Ensayo -dotado con dos millones y medio de pesetas- radica en que "Europa es anterior a las naciones que hoy la constituyen". "Europa viene de un poso común, surge de una fusión plural y todos los Estados, naciones o principados han participado en el desarrollo de esa cultura global; esos valores culturales plurales no se entienden sino dentro de un elemento común", explica González Seara, convencido por todo ello de que "en Europa es mucho más lo que une que lo que separa".

Los nacionalismos

Los mismos nacionalismos, "que en Europa han generado algunas de la aberraciones más grandes y han estado presentes en las dos grandes castástrofes del siglo XX" -las dos guerras mundiales-, son un producto de esa cultura europea. "Los nacionalismos intolerantes y excluyentes, ya sean de raza, clase o religión, van en contra de esa cultura de Europa y de los valores de la tolerancia, la libertad y los derechos", añade el catedrático de Sociología. Para González Seara, que recuerda que "en nombre de nada se pueden atropellar los valores de una persona", sólo los nacionalismos defensores de formas culturales y de mantenimiento de formas de ser dentro de una cultura más grande son enriquecedores: "Sólo en este sentido entran dentro de los propios valores culturales de Europa".González Seara es optimista sobre el futuro europeo. Con estos precedentes históricos, "en los que España ha jugado el papel de elemento clave en la constitución de esa cultura", el sociólogo cree lógico que "caminemos juntos". "Estoy convencido de que el futuro de Europa está en la unidad política; lo contrario sería un suicidio. La propia marcha de la historia, la idea de la mundialización y la comunicación imponen esa unidad, no solo económica, sino también política. Tendremos que dar muchas batallas, pero encontraremos menos dificultades que nuestros antepasados".

Uno de los 16 fundadores de Información y Publicaciones SA (INPULSA), editora del Grupo 16, de cuyo consejo de administración fue presidente desde 1971 hasta mayo de 1977, cuando dimitió para presentarse a las elecciones, González Seara fue primero senador por UCD y más tarde diputado por la misma coalición. En el Gobierno de Adolfo Suárez formado en abril de 1979 fue nombrado ministro de Universidades e Investigación, cargo que ocupó hasta febrero de 1981. González Seara afirma que hoy día la calidad de la enseñanza se resiente y que la degradación en los estudios medios repercute en la Universidad. "Hay que prestar antención a los planes de educación y a la formación del profesorado", señala el catedrático. "Hay un abandono lamentable de las humanidades, la historia y las asignaturas culturales, que dan al individuo una base acorde con esos valores culturales de la idea de Europa".