Mobutu cambia Lausana por Niza

El presidente zaireño, Mobutu Sese Seko, de 66 años, operado en Suiza de un cáncer de próstata, cuya extensión le ha provocado ya una metástasis ósea, abandonó ayer, de forma inesperada, su lujosa residencia en el hotel Beau Rivage Palace, donde se hallaba hospedado junto a otras 20 personas desde el 15 de agosto. Mobutu acababa de ver prorrogado su visado en Suiza hasta el 27 de noviembre. A pesar de ello partió a primera hora de la tarde en avión con destino a Niza, en la Costa Azul francesa, donde posee una mansión. No obstante, Mobutu no permanecerá mucho tiempo en suelo francés. El portavoz de la presidencia de Zaire, Kabuya Lumuna, declaró ayer en Kinshasa a la televisión nacional que el jefe del Estado regresará "en los próximos días" al país.

Mobutu, un antiguo sargento del Ejército, llegó al poder en 1965 mediante un golpe de Estado. Desde entonces gobierna Zaire con mano de hierro. Su debilitamiento físico ha coincidido con la crisis en la región de los Grandes Lagos que amenaza la integridad territorial de Zaire.

El enviado especial de las Naciones Unidas, el canadiense Raymond Chrétien, nombrado la semana pasada, tendrá que variar sus planes iniciales. Chrétien, quien áún no ha visitado la zona en conflicto, tenía previsto reunirse con Mobutu en Lausana. Ahora lo tendrá que hacer en Niza.

Pese a la marcha de Mobutu, el rey Juan Carlos no se hospedará, en contra de su costumbre, en el Beau Rivage, informa Ana Fernández desde Ginebra. El rey recibirá mañana en Lausana el premio Jean Monet, otorgado por la Fundación Johann Wolfgang von Goethe, por su labor a favor de la integración europea. El rey quería evitar todo contacto con Mobutu, aunque la razón oficial ha sido logística: la falta de habitaciones.