Duran asegura que lo negoció con Rato

"No hay, ninguna razón para negar a Cataluña la transferencia de los impuestos especiales porque el acuerdo con el PNV demuestra que las razones técnicas que lo dificultaban han desaparecido". Josep Antoni Duran Lleida, presidente del comité de gobierno de Unió Democrática, partido coligado con Convergència, repetía ayer el argumento de su socio Jordi Pujol. Pero aportando nuevos detalles. Especificó que él mismo habló en su momento de este asunto con el ministro de Hacienda, Rodrigo Rato, y con el de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy.Salía así al paso de las críticas vertidas contra CiU por pedir los impuestos especiales sólo por mimetismo del PNV. A juicio de Duran, la solución para una España plural no se producirá "si los hechos diferenciales que comporta la demanda de soberanía política se reconocen con nocturnidad y precipitación a altas horas de la madrugada". No lo citó, pero se refería a la negociación que se cerró la semana pasada entre el PP y el PNV, a escasas horas del debate parlamentario sobre las enmiendas a la totalidad de los Presupuestos del Estado, en el que los peneuvistas votaron a favor.

Duran aclaró que no pedirá los impuestos especiales para 1997: "El presidente Jordi Pujol ya trasladará al presidente del Gobierno central nuestras posiciones y nuestro calendario al respecto. Ahora lo que debemos es concentramos en la negociación de los Presupuestos, que en algunos casos no tenemos cerrada, especialmente en lo referente al capítulo de inversiones públicas para Cataluña".

"Neurosis colectiva"

Esta argumentación no aplacó la línea argumental del diputado del PP Aleix Vidal-Quadras: "No se puede plantear un Estado de las autonomías sobre la base de mirar de reojo al vecino permanentemente. Esto es absurdo, nos pondrá a todos en una situación de neurosis colectiva".Sobre otras negociaciones al margen del acuerdo público, Vidal-Quadras añadió: "Ese compromiso si no está en el acuerdo, no existe. Es como en el mundo judicial, lo que no está en autos no está en el mundo. Todo lo que fueran conversaciones privadas no tiene la menor relevancia política ni compromete a nadie. Esgrimir una conversación privada es algo que me parece ingenuo y carente absolutamnte de seriedad".

Los socialistas, a través de presidente del grupo parlamentario en Cataluña, Joaquim Nadal, expresaron su acuerdo en el fondo con la petición de mayores ingresos para Cataluña, pero discreparon con la forma. Según Nadal, "la mala negociación" realizada por CIU en el sistema de financiación autonómica provoca que Cataluña reciba todas las críticas del resto de comunidades, mientras que el País Vasco obtiene los beneficios. Para Nadal, "CiU está negociando mal, ha perdido el protagonismo que se había querido atribuir y deja en entredicho el buen funcionamiento y la buena financiación de Cataluña".

El dirigente del PSC, Josep María Sala, arremetió la actitud de Pujol: "Parece más un rabieta de una novia maltratada que otra cosa". Y añadió que ese comportamiento alimenta "la imagen en España de que Cataluña sólo quiere pedir, pedir y pedir, lo que desprestigia".