Cuando vuelan las cigüeñas

Hervé Diasnas es un auténtico poeta que juega a la asociación onírica y al cuadro del viaje interior. Ésa es la base de su obra, un despliegue de versos corporales encadenados por la inspiración lírica y aderezados por todos los. -medios teatrales a su alcance: magia ilusionista, circo, pantomima, danza contemporánea: todo vale para envolver al espectador en ese tránsito a la infancia eterna.En el argumento del dúo que se hace trío unos instantes está la lucha de los buscavidas que marcan su territorio, una picaresca atemporal que condimenta el tránsito tierno de estos cómicos de la legua al niño que todos llevamos dentro. Por momentos salta el humor -y por momentos la tragedia: hay mucho de comedia del arte, hasta de esperpento. Diasnas establece un duelo que es juego, y sus cuadros sugieren una continuidad.

En un momento del fantástico viaje a la nada del mismo sitio, esos dos hombres se disputan la avanzadilla, y sobre ellos vuelan en la misma dirección, las cigüeñas que hacen tabletear sus picos, casi como una matraca de cuaresma indicando las señas del cortejo, ayudando a llevar la maleta donde están apiñados los recuerdos y que por fin se vuelve el más cálido de los refugios. Le sourire de l'aube es un bello y discreto espectáculo madurado en la honestidad de un creador singularmente humanizado en su baile y en sus intenciones.