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Los alcaldes prefieren asfaltar calles antes que construir aulas infantiles o centros de salud

Vicente González Olaya

Antes asfaltar una calle que construir una escuela. El Gobierno regional, que ha dado el visto bueno al reparto de unos 61.000 millones de pesetas en los próximos cuatro años entre 178 municipios (todos menos la capital) a través del Plan Regional de Inversiones de Madrid (Prisma), se ha encontrado con una sorpresa: los alcaldes han pedido más calles de las esperadas

y menos colegios y centros de salud de los p revistos. De hecho, las partidas destinadas a estas obras no se agotaron. En cambio, las preparadas para asfaltar calles se quedaron raquíticas.Los datos del Prisma son elocuentes: la Dirección Regional de Administración Local -organismo que distribuye el dinero para las infraestructuras urbanas- tuvo que aumentar en 3.000 millones el dinero que tenía previsto invertir. En cambio, la Dirección Regional de Educación se topó con que le sobraban 1.000 millones de pesetas. Aunque peor fue lo de la Dirección Regional de Prevención y Promoción de la Salud, que había preparado 880 millones y, a la hora de la verdad, sólo recibió peticiones por valor de 20 millones.

Alejandro Sanz, director regional de Administración Local, justificó ayer a los regidores: "Es un poco extraño lo que han hecho, pero imagino que esperan recibir más ayudas para educación o sanidad por otros caminos y, por eso, han preferido obras municipales".

De todas formas, no todo lo que los alcaldes deseaban ha sido concedido por la Comunidad. Para repartir el dinero se redactó el llamado Documento de Criterios y Objetivos, a partir del cual los Ayuntamientos podían hacer sus peticiones. En este documento se establecía, por ejemplo, que los peblos no podían exigir inversiones para construir una plaza de toros cuando no tenían escuelas.

En grandes números, la urbanización de los pueblos se llevará unos 40.000 millones de pesetas; el equipamiento municipal, 20.000 millones; los polideportivos, 14.000 millones, y los parques, 9.300 millones. Sin embargo, el equipamiento educacional se queda con sólo 3.100 millones, y el de salud, con 2.250.

El factor que más ha influido a la hora de repartir el dinero ha sido la población de las localidades. Es decir, cuantos más habitantes, más dinero. El problema surge cuando la Administración se enfrenta con pueblos con menos de 100 habitantes, a los que, según este principio, les correspondería una ayuda de sólo unos escasos miles de pesetas.

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40 millones mínimo

Por eso, los redactores del Prisma hicieron una pequeña trampa. La cantidad mínima que se concedería a un municipio sería de 40 millones de pesetas. Por esta razón, pueblos como La Acebeda (53 habitantes), La Hiruela (58), Madarcos (30) y Puebla de la Sierra (68) recibieron ayudas extras. De tal manera que Madarcos se lleva 41 millones: 1.171.000 pesetas por vecino. Sin embargo, Móstoles (199.400 habitantes) recibirá 4.471 millones, lo que supone una cantidad mucho menor por vecino: 22.500 pesetas.

Al dinero que cada pueblo reciba de la Comunidad hay que añadir el que los propios municipios aporten para efectuar las obras. Y no todos pondrán el mismo porcentaje. Mientras que los pequeños no tendrán que aportar más de un 5%, los medianos y grandes deben poner entre el 30% y el 40% de más. Incluso, algunos municipios deseosos de recibir más inversiones, como Los Molinos (2.800 habitantes), propusieron elevar considerablemente su aportación con el fin de lograr más inversiones de la Comunidad. Y lo lograron.

Por comarcas, la que menos dinero ha logrado es la de San Martín de Valdeiglesias, a la que llegará el 2% del Prisma. La sierra norte se queda con el 4%; la de Alcalá de Henares, con el 12%, y la Corona Metropolitana -donde se concentra la mayor parte de la población regional-, con el 43%.Diferencias con el - PSOE

El Prisma es el plan de inversiones del PP para el periodo 1997-2000, que sustituye al anterior del PSOE, el llamado Plan Cuatrienal, que tuvo vigencia entre los años 1992 y 1995. Las diferencias económicas entre ellos son notables. Mientras el PP pone sobre la mesa 61.000 millones, el PSOE sólo reunió 35.000.

El plan del PP beneficia a los pueblos minúsculos (hasta 250 habitantes)" la mayoría gobernados por esta formación política. Ahora logran 1.600 millones frente a los 860 que les dieron los socialistas. Los que tienen entre 10.000 y 20.000 vecinos apenas consiguen mejorías: de 4.100 millones a 4.900. Los municipios medianos (entre 20.000 y 50.000 vecinos) son los que más se benefician. Duplican las ayudas: de 4.300 millones a 9.200. Los macromunicipios, los de más de 100.000 habitantes, -en su mayoría gobernados por el PSOE- también ganan. De los 9.000 millones del Plan Cuatrienal pasan a los 14.200 del Prisma, pero aseguran que los gobernados por el PP -los medianos- se llevan más.

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Sobre la firma

Vicente González Olaya
Redactor de EL PAÍS especializado en Arqueología, Patrimonio Cultural e Historia. Ha desarrollado su carrera profesional en Antena 3, RNE, Cadena SER, Onda Madrid y EL PAÍS. Es licenciado en Periodismo por la Universidad CEU-San Pablo.

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