LOS ÁNGELES DE LUCÍA

La actriz Lucía Bosé no está teniendo mucha suerte con los proyectos que tenía previsto realizar en la localidad segoviana de Turégano, que cuenta con cerca de 1.200 habitantes. Después de que no la dejaran instalar un museo dedicado a los ángeles en el priorato de San Frutos, ubicado en el bello paraje de las hoces del Duratón, ni en el castillo medieval de la villa tureganense, que acoge en su interior una iglesia románica, se ha visto obligada a cerrar un restaurante al que denominó Posada de los Ángeles, tan sólo un año después de haberlo abierto. Sin embargo, la madre del cantante Miguel Bosé y de las modelos Paola y Lucía Dominguín es persistente y toda su colección de obras escultóricas y pictóricas sobre serafines y querubines la colocarán en un antiguo molino que acaba de adquirir en este pueblo de Segovia. Mientras, el alcalde de la villa, el popular Pedro Velasco, que apoyaba la idea del museo de Rosé en el castillo, lamenta que la fortaleza se esté deteriorando y que nadie le ayude, hasta el punto de que ha tenido que realizar sendos sorteos de dos caballos de pura sangre, con los que ha recaudado cinco millones de pesetas, para realizar obras urgentes en el monumento.-