Ardanza aplaza a noviembre la convocatoria del Pacto de Ajuria Enea por el enfrentamiento entre los partidos

El presidente del Gobierno vasco, José Antonio Ardanza, ha abierto un "largo" periodo de reflexión para que los partidos del Pacto de Ajuria Enea intenten sentar las bases de un nuevo acuerdo sobre la pacificación en Euskadi. Las crispadas relaciones que enfrentan a las formaciones democráticas en asuntos como el acercamiento de los presos de ETA, el derecho de autodeterminación o el caso GAL han aconsejado al lehendakari el aplazamiento.La convocatoria no se producirá hasta finales de noviembre, pese a que la reunión de la mesa de Ajuria Enea estaba prevista para octubre. Los partidos que respaldan al Gobierno autónomo, PNV, PSE- PSOE y Eusko Alkartasuna, se han comprometido a iniciar un proceso de acercamiento de posiciones, conscientes de que una nueva convocatoria sin avances en la mesa por la paz pondría en duda seriamente su utilidad.

La presidencia del Gobierno vasco ha optado por la "prudencia" y ha decidido un "retraso táctico" de la convocatoria, con la intención de que las discrepancias entre los partidos puedan suavizarse entretanto. El lehendakari ha abierto un "periodo" de consultas discretas, con la intención de evitar que las discrepancias puedan afectar al foro de debate cuyo objetivo es la pacificación del País Vasco. Los partidos remitirán a la mayor brevedad un documento con sus respectivas posiciones al presidente del Gobierno vasco y luego Ardanza consultará con los portavoces para la elaboración de un documento de síntesis.

Según explicaron fuentes de la presidencia, "las cosas están como en junio", cuando el lehendakari remitió a los partidos un borrador en el que proponía a los partidos comenzar a avanzar en la elaboración de "estrategias globales" para responder a las provocaciones de ETA y de su entorno.

Ardanza entiende que la política antiterrorista tiene que ser el fruto de un "compromiso" entre los partidos democráticos y el Gobierno central, un acuerdo básico que permita a cada Administración diseñar y ejecutar las medidas en función de sus competencias, pero sin salirse de una filosofía compartida y pactada.

Sin embargo Izquierda Unida considera un error el aplazamiento. Para el partido que dirige en Euskadi Javier Madrazo, la mesa de partidos debe afrontar sus propias limitaciones y avanzar mediante mayorías cualificadas, abandonando el consenso si supone un freno para el diseño de estrategias de pacificación.