Cascos defiende el papel del Senado, cuestionado por el PSOE

El papel'del Senado fue puesto en tela de juicio por dos veces en la tarde de ayer. Primero por el portavoz adjunto del PNV, Xabier Albistur, que amenazó incluso con la retirada de su partido de la Cámara alta tras darse luz verde a la tramitación de las modificaciones del PP al acuerdo sobre el órgano común vasco-navarro. Y luego por el portavoz socialista, Juan José Laborda, quien culpó al Gobierno del PP de la paralización del Senado. Esto último fue desmentido por el ministro de la Presidencia, Francisco Álvarez Cascos.

Laborda acusó al Gobierno del PP de menospreciar a la Cámara alta y no haber celebrado el debate sobre el estado de las autonomías por "no querer dar la cifra del coste de la financiación autonómica, que ni siquiera figura en los presupuestos".

El portavoz del PSOE denunció la incomparecencia de ministros en el Senado, pese a la reiterada solicitud de la oposición. Aunque no lo citó en el pleno, se refería a la ministra de Educación, Esperanza Aguirre, también senadora, cuya comparecencia ha sido rechazada hasta cinco veces por el PP al alegar que "se encontraba de viaje".

Laborda denunció también la conducta del vicepresidente económico del Gobierno, Rodrigo Rato, del que dijo que en su interpelación en el Senado no dijo nada de las tasas farmaceúticas, donde ha habido una ponencia, para anunciarlo después en una rueda de prensa en La Moncloa.

'Incumplimientos'

También denunció el incumplimiento de compromisos acordados en plenos del Senado celebrados en junio pasado, como la creación de ponencias sobre la violencia juvenil, privatizaciones y financiación autonómica. Laborda acusó al Grupo Parlamentario y al Gobierno del PP de no promover la iniciativa en la Cámara alta. "No pueden explicar lo que hacen porque entra en contradicción con lo que dijeron que iban a hacer", dijo.El ministro de la Presidencia, Francisco Álvarez Cascos, replicó a Laborda que la razón del aplazamiento del debate sobre el estado de las autonomías radicaba en que el centro de la discusión política, el modelo de financiación autonómica, estaba desplazado en el Consejo de Política Fiscal y Financiera y en el Congreso con el debate de los Presupuestos. Álvarez Cascos comprometió al Gobierno a celebrar ese debate "cuando el contenido político le dé sentido". Aunque el vicepresidente no precisó fechas, fuentes parlamentarias apuntan que el debate sobre el estado de las autonomías se celebrará en febrero.

El ministro también comprometió al Gobierno a impulsar el papel del Senado y contrarrestó el ataque de Laborda con un cúmulo de datos comparativos entre las iniciativas del PSOE y el PP. Ayer mismo, el Senado decidió que en un próximo pleno se constituirá su comisión más importante, la que reformará la Cámara alta para transformarla en Cámara de las autonomías, con reforma constitucional incluida.