Otro niño estadounidense, de siete años, sancionado por acoso sexual por besar a una compañera
Una semana después de que la sanción a un niño de 6 años por un beso dado a una compañera de colegio levantara ampollas en EEUU, ha surgido un nuevo caso, esta vez en Nueva York. Un chico del barrio de Queens, de 7 años, ha incurrido de nuevo en una conducta considerada acoso sexual. La sanción es más fuerte: cinco días de suspensión por besar a una compañera y quitarle un botón de la falda. De Andre Dearinge llegó a casa el pasado viernes ignorante de la que le había caído encima y le dio a su madre, Erica Whitel de 23 años, un sobre que él imaginaba que era una buena nota, "porque hoy he sido muy bueno", cuenta el Neiv York Daily News, Erica se encontró con que el director de la escuela pública 104 de Far Rockaway le decía que su hijo no podía asistir a la escuela la semana siguiente: "lamento tener que comunicarle que su hijo debe ser sancionado". La razón: acoso sexual.
Erica White se enteró de lo ocurrido, porque su hijo reconoció sin ningún rubor que el día anterior había besado a una niña porque me gusta" y le había quitado el botón de la falda porque su libro favorito trata de un oso al que le falta un botón en la chaqueta. La reacción de la mujer fue considerar "una locura" la acusación y quejarse a las autoridades.
Chiara Coletti, portavoz del Departamento de Educación, informó de la convocatoria una reunión para discutir el problema con la presencia del chico, su madre, los profesores y las autoridades administrativas. - "Él colegio ha citado a todos tan pronto como ha sido posible para garantizar que esta delicada situación se aborde con toda sensatez", según la portavoz, probablemente horrorizada de que se repita el espectáculo.
Para los cinco días de suspensión, el colegio aplica el reglamento en que se define el acoso sexual como contactos físicos inadecuados, comentarios, rumores y propuestas. No se fijan edades mínimas y se recomiendan sanciones que van desde una regañina hasta una expulsión de 30 días como máximo. El caso puede permanecer los próximos 10 años en el expediente del niño.
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