Bertelsmann confirma su renuncia a la televisión digital y augura pérdidas a su competidor Kirch

El consorcio alemán de los medios de comunicación Bertelsmann, que logró en el ejercicio 1995/96 un beneficio neto de 905 millones de marcos (76.000 millones de pesetas), ha decidido concentrarse en la televisión privada, pero congela definitivamente los planes de televisión digital, por considerarla por ahora un negocio en el que "se producirán pérdidas enormes". Así lo anunció la presidencia del consorcio en la presentación del balance anual.Queda Gütersloh -la ciudad de Westfalia sede de Bertelsmann- fuera de las grandes líneas ferroviarias y se necesita transbordo para llegar. La víspera de la conferencia de prensa, los directivos de Bertelsmann, reunidos a cenar con los periodistas, se mostraban casi obsesionados en que la prensa no se interesase "sólo por el 2% de nuestro volumen de negocios". Este es el porcentaje que representa para Bertelsmann la televisión digital de pago. No obstante, el interés de los periodistas se centraba en este punto, tras la guerra que mantuvieron Bertelsmann y el zar Leo Kirch.

El miembro de la presidencia de Bertelsmann, Thomas Middelhoff, de 43 años, considerado el estratega del consorcio, desafiaba a los periodistas que le rodeaban: "Apuesto dos cajas de champán francés a que Kirch no conseguirá 400.000 abonados para DF1 [television digital de pago] antes de finales de 19,97, si lo hace sin o contra Premiere". En Premiere, canal codificado de pago -la versión alemana de Canal + -, Bertelsmarin es socio mayoritario y lleva la gestión, mientras Kirch tiene una participación del 25%. Los dos gigantes de la televisión no han llegado a un acuerdo para explotar la digital de pago a partir de Premiere, ni para un descodificador común.

En la conferencia de prensa de resultados, tras más de dos horas de exposiciones, el presidente de Bertelsmann, Mark Wossner, resumió con absoluta claridad la postura sobre el abandono de los planes de llevar adelante Club RTL y producir un descodificador.

Wossner calificó de lamentable desde un punto de vista social y desde la perspectiva de una economía de competencia en el mercado" no haber logrado un descodificador común por el afán de Kirch de imponer el suyo y marchar solo. Dejó luego del todo claro que la prioridad absoluta de Bertelsamin es la televisión privada abierta, financiada con publicidad. Para ello se culminará a principios de 1997 la alianza ya anunciada entre CLT (Compañía de Televisión de Luxemburgo) con la empresa UFA de Bertelsmann.

Después el interés del consorcio se orienta a desarrollar Premiere y digitalizarla, para conseguir una televisión a la carta (payper view), en la que se pueda pagar por ver acontecimientos especiales.