El déficít comercial se redujo un 6,1% hasta julio
El déficit comercial alcanzó en los siete primeros meses del año los 1,56 billones de pesetas, cifra que representa una disminución del 6,1 % en relación al mismo periodo del año anterior. Según datos publicados ayer por el Ministerio de Economía y Hacienda, las exportaciones sumaron hasta julio 7,46 billones de pesetas y los importaciones sobrepasaron los 9,01 billones, tras crecer un 12,7% y un 8,9% respectivamente.No obstante, en términos reales (descontada la inflación), esta diferencia porcentual se reduce a poco más de un punto, ya que los precios de las exportaciones crecieron más que los de las importaciones. Una vez efectuada esa corrección, los crecimientos son del 9,3% en el caso de las ventas al exterior y del 8, 1% en el de las compras.
A la vista de estos datos, el Ministerio de Economía opina que el mayor dinamismo de las exportaciones y de las importaciones anticipa mejores datos sobre la actividad industrial, refuerza los signos de recuperación del consumo y confirma la fortaleza de la inversión en bienes de equipo.
La aportación de la demanda exterior al crecimiento del PIB sigue siendo ligeramente negativa, ya que las importaciones tienen mayor peso relativo que las exportaciones.
Por grupos de productos, Economía resalta la aceleración de las ventas al exterior de bienes de consumo no alimenticio (que crecieron un 10,8% en los siete primeros meses del año) y el de los bienes intermedios (11,3%). Entre las importaciones, destaca un aumento del 12,6% en los bienes de consumo no alimenticio y de un 9,9% en los bienes de equipo.Crecen las exportaciones
Sólo en el mes de julio, el comercio exterior arrojó un déficit de 222.200 millones de pesetas, un 6,3% menos que en igual mes del año pasado. Las exportaciones totalizaron casi 1,09 billones de pesetas y las importaciones 1,31 billones, cifras que representan crecimientos porcentuales de 25,8 y de 18,9 puntos, respectivamente.
Estos datos muestran, según el Ministerio de Economía, que la reducción del déficit proviene, no de un debilitamiento de las importaciones -que indicaría un bajón en el ritmo del crecimiento económico-, sino del fuerte crecimiento de las exportaciones.
Para el ministerio, este comportamiento expansivo de las ventas de productos españoles al exterior y los indicios de reactivación de la demanda interior explican la recuperación de la producción y el empleo industrial en el segundo trimestre del año, mientras que las importaciones apuntan a un mayor consumo e inversión en los próximos meses.
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