Un esfuerzo

Quisiera responder a la carta titulada Funcionarios, del ciudadano Vicente Piera Gómez, de Aguadulce (Almería), aparecida en EL PAÍS del 9 de septiembre de 1996. Amigo Vicente, llevo ocho años en el sector privado haciendo algo que no es lo mío. Con el paro que hay no debo quejarme, pero tampoco a mí me han regalado nada. Estuve en una empresa que quebró a causa de disposiciones gubernamentales que no hicieron posible, por tiempo, nuestra reconversión; sin embargo, ni los funcionarios de entonces se sintieron culpables por seguir experimentando su subida, ni el Estado tuvo condescendencia con los que nos quedamos en la calle, ni el IPC dejó de subir aquel año.Pese a mi situación, creí justa la revisión que se hizo de las pensiones. Lo llaman "solidaridad social", o algo así. En otra empresa se "trapicheaba" con contratos de aprendizaje, que por cierto incumplían con los requisitos que fijaba la ley, y se "capeaba" el exceso de trabajo con gente que, sabido era, nunca pasaría el periodo de prueba, pero aligeraban el trabajo. En vacaciones desaparecieron dejándome a deber nóminas y liquidación. Recuerdo que la vida siguió subiendo y sólo yo me ajusté el cinturón, aceptando trabajo por lo que me dieran; pero no creo que tu "nivel de vida" notara nada. ¡Ah!, también creció el censo de pensionistas que cobró de mis impuestos. Era justo.

No puedo extenderme; sin embargo, quisiera recordarte que tú no te verás sometido, por ser funcionario, a incertidumbres laborales tales, pero a cambio tu empresa, el Estado, al que hoy pago para que tengas tu sueldo y del que no recibo más que mis equilibrios en la cuerda floja, te pide solidaridad. Tu empresa te dice que hay que ajustarse y que, aunque no te dejarán sin empleo o sueldo porque ya, te digo que pago mis impuestos de momento, hagas un esfuerzo.

Creo que también es justo, ¿no? Los estudios demográficos dicen que España envejece, y confiemos en que cuando tú y yo tengamos 65 años, la escasa población infantil actual "considere justo" estudiar una forma de pagarnos algo, nada del otro mundo, para poder "sobrevivir". Si no es por altruismo, elige la otra opción: asegura tu futuro dándoles ejemplo hoy.-