La democracia en Chile
Soy un turista chileno. He leído en esta sección (el 11 de septiembre) una carta del lector Mario Boero, quien opina que afirmar que en Chile hay democracia -como lo ha hecho el embajador Álvaro Briones- es un "contrasentido" y una "falacia" por cuanto "Pinochet decide tantas cosas a raíz de su poder en el Ejército".Podemos asegurarle al señor Boero que los chilenos sentimos que vivimos en democracia -aunque con muchas imperfecciones y con muchas ataduras, no sólo legales, que dejó como herencia la dictadura pinochetista-, que se conquistó a través de las mismas disposiciones contenidas en la Constitución de 1980, hecha a la medida para el general Pinochet, pero que no respondió a su propósito; y que se ha ido lentamente consolidando gracias a la prudencia y sagacidad de los presidentes Aylwin y Frei.
En cuanto al general Pinochet, la misma Constitución señala que permanecerá en el cargo de comandante en jefe del Ejército hasta 1998, lo cual el Gobierno, celoso de guardar la Constitución, ya que un Estado de derecho es la mayor garantía de supervivencia de la democracia, ha respetado escrupulosamente; y el general, por su par te, ha procurado mantenerse dentro de los límites que le corresponden, salvo en el caso de sus arengas político -militares en el mes del Ejército (coincidente con las fiestas patrias), que producen múltiples molestias, pero cada vez menos, por que están transformándose en parte del folclor nacional. Los tránsitos hacia la democracia, después de prolongadas dictaduras, son difíciles, y los casos de España y Chile, cada uno en su estilo, son buen ejemplo de ello.-
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