Primeros del curso
Nil Lara es el nombre de un compositor norteamericano de nacimiento, pero plenamente latino por adopción estética y vivencias. El lunes presentó en directo en Madrid las canciones de su último disco, llamado como él, y repleto de música espiritual y caliente. De algún modo deudor del angelino Ben Harper, Nil va más allá, macerando rock al estilo Couting Crows, con una base rítmica que sabe a Caribe. Además canta muy bien, poniendo muchas veces su voz al límite de tensión, y de vez en cuando lo hace en castellano con deje de Miami. Su espectáculo no deja indiferente y sus canciones tampoco. He aquí un candidato, a "sorpresa del año".Sobrinus Buenas Noches Rose han pergeñado un nuevo estilo de show que, si la crisis avanza, puede ser mas que un camino a tomar. Aparte de actuar cada uno por su lado, desarrollando, sus respectivas carreras, ambos grupos madrileños suelen aparecer también juntos sobre el escenario en una especie de jam session organizada en continuas entradas y salidas por parte de los componentes de las dos bandas. Cada uno hace su repertorio. Los primeros, con un rock intenso, y. tremendamente complejo en su concepción y ejecución, pero que, a cambio, resuulta muy efectivo. Los Rose son ya unos, clásicos madrileños, a punto para su segundo disco, que siguen teniendo en las evoluciones psicodélicas del cantante Jordi su baza más directa sin desmerecer al resto del grupo. El experimento entre ambas bandas es, cuando menos, algo diferente, y esto es muy de agradecer.
Y gracias hay que darle quinteto madrileño Protones. Gracias por preservar la magia del pop' n' roll lejos de los agujeros negros del negocio. Por sacar un segundo disco, Nothing to say, tan eléctrico y fresco como el primero. Por dar conciertos tan vibrantes que hacen que el reloj parezca retroceder a los gloriosos tiempos del 76. Por su ejemplo como banda que está en la música porque se lo cree. Sólo tienen una mancha en su historial: la negativa de su cantante, Pepe -el hombre que o habla o canta-, a darle una oportunidad a la, lengua de Cervantes. Hasta que se decida, se puede seguir disfrutando viéndoles en vivo y escuchándoles en temas como, Keep it (in mind) o Rest of my life y pensando en lo que ganarían en castellano. ¿Serán tercos?
Babelia
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