Barrionuevo recusa al juez Manzanares por "enemistad manifiesta" y reclama un juicio con garantías
El ex ministro del Interior José Barrionuevo, procesado en el caso GAL, recusó ayer al magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo José Luis Manzanares para que éste no pueda formar parte del tribunal que en su día le juzgue, debido a la "enemistad manifiesta" que le ha demostrado durante su etapa de vicepresidente del Consejo General del Poder Judicial.El abogado de Barrionuevo, Pablo Jiménez de Parga, presentó al alto tribunal una colección de las declaraciones más incendiarias del magistrado contra Barrionuevo y el PSOE, al tiempo que recuerda que el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo ha proclamado que "no sólo debe hacerse justicia, sino parecer que se hace".
La defensa del ex ministro explica que estuvo esperando a que el magistrado José Luis Manzanares se abstuviese de intervenir en el caso GAL, "de acuerdo con lo que él mismo había declarado en varias ocasiones a los medios de comunicación". "No nos queda otro remedio que presentar la recusación en defensa de los derechos fundamentales de mi representado", añade.
Jiménez de Parga recuerda algunas de las más duras declaraciones de Manzanares antes de volver a la Sala Segunda: "Los secuestros, los asesinatos, las malversaciones se producen en los aledaños de un Poder Ejecutivo sustentado por un partido político, el PSOE".
Con Barrionuevo, Manzanares no fue menos contundente: "Ahora se está enviando el mensaje de que bastaría con que el señor Barrionuevo no fuera condenado para que ya tuviera en el bolsillo un certificado de que él no estaba implicado". Y, tras señalar que los jueces "no suelen dar certificados de inocencia", añadía: "Los jueces absolvemos, aunque creamos que lo más probable es que un señor sea un delincuente, si es que no tenemos la absoluta seguridad".
Según Jiménez de Parga, éstas y otras declaraciones del mismo tenor ponen de manifiesto la "enemistad manifiesta" que Manzanares siente "hacia Barrionuevo, el Gobierno del que fue ministro y el partido político al que pertenece". "Es evidente", añade, "que la actitud con la que él va a enfrentarse al enjuiciamiento de la presente causa no es la que exige el derecho fundamental de mi representado a un proceso con todas las garantías". El procesado deja abierta la puerta para recurrir al Constitucional.
Jiménez de Parga recuerda que el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo ha sentenciado que en el ámbito de la imparcialidad, "incluso las apariencias pueden revestir importancia". "Y atendiendo a las apariencias", añade el letrado, "es imposible no llegar al menos a dudar de la imparcialidad del magistrado recusado".
La recusación deberá ser resuelta por el pleno de la Sala Segunda del Supremo. Manzanares dijo ayer que responderá a esta iniciativa de Barrionuevo "en el ámbito que es propio, el judicial".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.