Antonio Barrera mejora

El novillero Antonio Barrera, herido de pronóstico gravísimo, en la femoral el pasado miércoles en El Álamo (Madrid), ha experimentado una notable mejoría. Se encuentra hemodinámicamente estable y anímicamente tranquilo, informan fuentes del Hospital Universitario de Getafe, donde fue intervenido quirúrgicamente por espacio de varias horas en la noche del miércoles al jueves últimos.

El parte facultativo facilitado ayer en el mencionado centro dice que había sido intervenido por el servicio de Angiología y Cirugía Vascular, en el que se procedió a la reconstrucción de la arteria y la vena femoral El estado del herido -concluye el parte- es hemodinámicamente estable y la circulación sanguínea buena.Casimiro López, apoderado de Antonio Barrera, confirmaba el buen estado anímico del torero quien le manifestaba sus deseos de volver a torear. "Os vais a enterar de quién soy yo", le decía. Sin embargo le preocupaba no sentir la pierna herida; "como si estuviera dormida". Casimiro López comunicó a los médicos estos síntomas y le confirmaron que la circulación sanguínea era normal.

La cogida se produjo a poco de empezar el festejo de El Álamo. Barrera recibió al primer novillo con una larga cambiada de rodillas, El animal se revolvió, el torero aguantó la embestida tirando una nueva larga y fue entonces cuando sufrió la cornada. El impacto fue tremendo y salió de la herida tal chorro de sangre que le llegó a la cara. Trasladado a la enfermería, le operó el doctor García Padrós, que es el cirujano jefe de la enfermería de Las Ventas.

"Tengo la certeza de que García Padrós le salvó la vida", comenta el apoderado. Su intervención resultó providencial pues el torero se desangraba". El parte facultativo del doctor García Padrós reseñaba herida gravísima en la cara interna del tercio superior del muslo izquierdo, con trayectoria hacia adentro y arriba de 20 centímetros, que desgarra la vena femoral, contusionando la arteria femoral y la vena safena; shock hemorrágico.

El torero fue trasladado al Hospital Universitario de Getafe, donde estuvo acompaña do por sus padres y Casimiro López, que . viajaron desde Barcelona al enterarse del percance, y Gonzalito, que colabora en su apoderamiento. La noche resultó muy inquietante, pues el torero entró en el quirófano a las 22.30 del miércoles y no salió hasta las 5 de la madrugada del jueves. Antonio Barrera, de 20 años, nació en Sevilla pero vive con sus padres en Barcelona desde muy niño. Debutó en Tarragona en 1991 y hasta 1995 no empezó a consolidar sus condiciones toreras. Este año había participado en 32 festejos, cuatro en Barcelona, y tenía concertadas otras 22 actuaciones, una de ellas su presentación en Las Ventas.