El mando militar ruso da dos días a los civiles para que abandonen Grozni antes de atacar

La población civil tiene 48 horas para abandonar Grozni Después de este plazo, los rusos machacarán la ciudad con la aviación y la artillería. Así lo advirtió el comandante de las fuerzas federales, después de que el presidente Borís Yeltsin ordenara "restablecer la legalidad" en la capital chechena. Mientras tanto, las noticias que llegaban anoche desde allí eran contradictorias: los independentistas aseguraban que los tropas federales rusas habían comenzado una gran ofensiva violando el alto el fuego firmado el pasado sábado mientras que éstas desmentían categóricamente el ataque.

Los rusos "comenzaron una ofensiva contra el centro de Grozni desde prácticamente todas las direcciones", dijo ayer el portavoz independentista, Movladí Udúgov, precisando que a esa hora -las siete de la tarde- se habían entablado encarnizados combates en tres barrios diferentes de la capital chechena."La reanudación de las acciones militares en Grozni por la parte rusa es tanto más inverosímil, cuanto que en estos momentos trabaja en Chechenia una comisión del Consejo de Seguridad", señaló por su parte un representante de las fuerzas federales.

A pesar del este desmentido ruso, los acontecimientos del día de ayer indicaban que probablemente las tropas federales intentaron. acudir en ayuda de los soldados atrapados en Grozni. Así, los rusos ya habían advertido por la mañana que estaban preparados para usar la fuerza con el fin de desbloquear a sus compañeros. Como dijo un representante del mando de las fuerzas federales en Chechenia: "No podemos tolerar por más tiempo esta situación. Los soldados bloqueados en Grozni se encuentran sin alimentos ni agua, y los heridos necesitan ayuda urgente". Además, los guerrilleros utilizan la tregua para - "reforzar sus posiciones en Grozni, levantan construcciones defensivas y minan los accesos a ellas", por lo que será necesario utilizar "la aviación y la artillería para liquidar las defensas" de los independentistas.

Retirada

Ya al mediodía los rusos rompieron el alto el fuego y trataron de liberar a sus compañeros en la zona de la plaza Minutka, para lo cual usaron la artillería. Y más tarde, en el encuentro de los representantes del mando ruso con el mando guerrillero, las partes no lograron ponerse de acuerdo y firmar el documento sobre las actividades de la Comisión Especial de Control del alto fuego: en el último momento, los federales insistieron en que se incluyera un punto sobre la retirada de las fuerzas separatistas de Grozni.Si a esto se agregan las órdenes dadas ayer por el presidente Yeltsin, quien encargó al secretario del Consejo de Seguridad, Alexandr Lébed, "restablecer la legalidad que existía en Grozni hasta el 5 de agosto", se concluye que no es en absoluto inverosímil el que los rusos hayan lanzado una ofensiva contra la capital chechena o por lo menos que lo hayan intentado

La orden presidencial significa que las sedes de las instituciones gubernamentales, los puestos de control de los soldados rusos y lugares de emplazamiento de unidades de tropas, rodeados por los guerrilleros que controlan casi todo Grozni, deben ser desbloqueados y, en última instancia, que, los independentistas deben abandonar la ciudad.

Al margen de si los rusos desistieron de atacar ayer o han fracasado en sus intentos, lo que está claro es que en los próximos días la guerra se reanudará con renovada fuerza si los guerrilleros no se retiran de Grozni. Konstantín Pulikovski, el comandante de las fuerzas federales en Chechenia, anoche dio un plazo de 48 horas a los separatistas para hacerlo; de lo contrario, comenzarán "las acciones militares de envergadura".

La reanudación de los combates. en la capital chechena va en contra de los planes de Lébed, quien desea terminar la guerra a cualquier precio y retirar las tropas federales de la república norcaucásica rebelde. Mientras tanto, el Ministerio del Interior se opone a la idea de retirar las tropas y, por el contrarío, cree que hay que reforzar las unidades rusas en Chechenia y continuar la eliminación de los separatistas, que a sus ojos no son más que bandidos y terroristas.

El general Pável Golubets, primer viceministro de Interior y jefe del Centro Coordinador de ese ministerio en Chechenia, confirmó ayer esta posición: "Mientras nosotros nos abstenemos de aumentar los esfuerzos bélicos y de reforzar el grupo de tropas del Ministerio del Interior en Chechenia, los separatistas movilizan más y más nuevas fuerzas". Los halcones del Ministerio del Interior por el momento están ganando su batalla contra Lébed. El recrudecimiento de la guerra parece inevitable, salvo que Serguéi Jarlámov, el vicesecretario del Consejo de Seguridad que se encuentra en Chechenia, logre convencer a los independentistas de que abandonen voluntariamente Grozni.