Unos 2.000 médicos alemanes procesados por estafa a la seguridad social por pactos con los laboratorios

La Fiscalía de Wuppertal ha decidido, tras dos años de investigaciones, abrir sumarios penales contra 1.860 médicos y técnicos de 418 clínicas y hospitales alemanes, por la sospecha de haber estafado a las cajas de la seguridad social.A base de inflar los precios de válvulas mitrales y otros instrumentales de cirugía cardiaca, los médicos y tres laboratorios proveedores causaron a la seguridad social un daño de por los menos, 33 millones de marcos (unos 2.800 millones de pesetas). Los médicos percibían, a cambio de los excesos en la facturación, dinero que se ingresaba en cuentas especiales o prestaciones en especie, tales como viajes a congresos en compañía de toda la familia, o bien costosos aparatos profesionales.

Las empresas proveedoras contabilizaban estos pagos como gastos para investigación. Todas las clínicas universitarias y centros de enfermedades coronarlas alemanas se encuentran más o menos implicados en lo que ya se considera uno de los mayores escándalos de la medicina del país en la posguerra.

Rodeado por nada menos que 5.000 archivadores, incautados en tres empresas provedoras, se presentó ayer el portavoz de la Fiscalía de Wuppertal, para informar sobre los resultados de dos años de investigación. Según la Fiscalía, se han encontrado 11.000 casos individuales de corrupción.

El resultado ha sido demoledor para la profesión médica alemana, que ha puesto de manifiesto que se movía en una ciénaga de corrupción, al estafar a una seguridad social que hace agua por todas partes y no sabe cómo afrontar los crecientes gastos. Esto no parecía importarle a los médicos, que ahora se verán procesados por estafa y falsificación. Según la Fiscalía, algún médico jefe, una de las profesiones de por sí mejor pagadas en Alemania, con ingresos muchas veces en torno al millón de marcos (84 millones de pesetas), llegó a percibir como soborno de las proveedoras de válvulas mitrales hasta medio millón de marcos (42 millones de pesetas).

Las organizaciones gremiales de los médicos se han pronunciado en contra de una condena global de la profesión y piden que no se condene sin sentencia de los tribunales. Un portavoz de la caja de seguros del empleado pidió dureza en la persecución de quienes se enriquecieron de forma legal a costa de los asegurados, que tienen que financiar las cuotas. "Las ovejas negras en bata blanca dañan a toda la profésión", comentó el portavoz.