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La rentabilidad de las empresas madrileñas creció el 9% en 1995

La economía va bien, e irá mejor. Esta opinión se desprende de la encuesta realizada por la Confederación Empresarial Independiente de Madrid (CEIM) entre los empresarios de la comunidad sobre la situación en 1995 y las perspectivas para 1996. El año pasado, la rentabilidad de las empresas creció el 8,9%.Los empresarios confirman que la recuperación económica, iniciada en 1994, se afianzó al año siguiente. Así, las ventas crecieron el 5,5% el año pasado, frente al aumento del 3,4% en la anualidad anterior. La demanda de bienes y servicios aún es débil pero crece gracias al despegue de las inversiones en un 9%, frente al 2,8% de 1994.

El año pasado, el empleo aumentó por primera vez, aunque sólo lo hizo en un 0,4%. "Cabe destacar que las contrataciones no fijas vigentes han continuado descendiendo", señalan los empresarios. Los costes de producción se han mantenido estables, o incluso han descendido. La elevación de los precios en un 2% ha permitido mejorar los márgenes empresariales. Así, la rentabilidad de las empresas madrileñas creció un 8,9% en 1995 frente al 0,2% del año anterior.1,3 billones por cobrarA la vista de ese panorama, los empresarios madrileños creen que en el presente año la actividad económica continuará creciendo. Los costes de producción siguen contenidos, al tiempo que mejora la situación financiera de las compañías.La encuesta de la patronal CEIM señala que la deuda contraída por entidades públicas con empresas madrileñas experimentó en 1995 el mayor crecimiento de los últimos cuatro años. Asciende a 1,32 billones de pesetas. Este monto supone casi la mitad de lo que facturaron las firmas madrileñas al sector público el año pasado.

De cada 100 pesetas por pagar, 61 las adeuda la Administración central; 13, las comunidades autónomas; 11, los Ayuntamientos, y 10,5, las diputaciones. El resto de la deuda corresponde a las empresas públicas. Las firmas madrileñas tardan, como media, 6,3 meses en cobrar sus facturas de las administraciones públicas. Los ayuntamientos son los que tardan más en pagar (nueve meses de media), seguidos por las diputaciones. Sin embargo, el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid son de los menos morosos: pagan al cabo de tres meses. Los Gobiernos regionales son los más rápidos en saldar la cuentas.

Por otra parte, los empresarios madrileños han dejado de percibir la presión Fiscal como su principal problema (38% de las opiniones). El primer lugar entre los quebraderos de cabeza es la debilidad de la demanda (46% de las respuestas). La tercera preocupación son las cuotas a la Seguridad Social. En cuanto al personal, más de la mitad de las compañías no tiene "ningún problema" con los empleados por baja productividad, absentismo o conflictividad social. Sólo el 6,3% confiesa tener "muchos problemas".

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