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El pacto de Ruiz-Gallardon con los sindicatos arranca a trompicones

Han pasado ocho meses desde que Alberto Ruiz-Gallardón consiguió la foto del pacto social. Pero, hasta ayer, la foto no cobró vida. La concertación social arrancó a trompicones: sindicatos y patronal se enfrentaron por el Servicio de Ayuda a Empresas en Crisis (Saecri). El Gobierno de Madrid (PP) opina como los empresarios y reconoce que el acuerdo sobre este asunto está "muy lejos".

El Saecri fue un instrumento que el Gobierno de Joaquín Leguina pactó con sindicatos y patronal para sacar del pozo a empresas en dificultades. Se concedieron ayudas por 500 millones a ocho empresas. "Pero tan sólo una sobrevivió", recordó ayer Luis Blázquez, consejero de Economía.El PP quiere cambiar los criterios para socorrer a sociedades en apuros. "Les pediremos un plan de viabilidad y que el empresario aporte el mismo dinero que la Comunidad para garantizar la solvencia de la operación", dice Blázquez. Rodolfo Benito, secretario general de CC OO-Madrid, cree que el nuevo sistema no sirve y elimina de hecho el Saecri. La patronal madrileña se opone a que los sindicatos decidan sobre estas ayudas, según explicó ayer su número dos, Roberto Molero.

Al tropiezo siguió la desconfianza. Los sindicatos piensan que la concertación social es inútil si los presupuestos olvidan reservar dinero para aplicar los acuerdos sobre el empleo.

Elaboración del presupuesto

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Ruiz-Gallárdón se puso firme: "No aceptamos la propuesta de Comisiones Obreras sobre la negociación del presupuesto con los sindicatos. Es competencia del Gobierno, y así va a seguir, aunque incluiremos las partidas necesarias para desarrollar los acuerdos de la concertación social".

Después, el presidente regional lanzó su mensaje de esperanza: "La paz social es un elemento de competitivad y anima a los empresarios a invertir. Aquí existen cauces permanentes de diálogo".

¿Hay paz social en Madrid? Los sindicatos dudan: "Ya veremos si hay paz social. Olvida el presidente los problemas que hay en Alcatel, Sintel, Diario 16... ", explica Rodolfo Benito.

"Hay discrepancias de fondo importantes", añadió José Ricardo Martínez, secretario general de UGT-Madrid. El empresario Roberto Molero prefiere el optimismo: "Todas las discrepancias son solucionables".

Los sindicatos critican que, tras un año de Gobierno, el PP no ha tomado medidas para el empleo. "Aquí se habla mucho, se negocia menos y no se concluye nada", señaló Benito.

Ayer se acordó la creación de las cuatro agencias pactadas (financiera, de empleo, de formación y de desarrollo), cuya sede será un edificio comprado por el anterior Ejecutivo en Carabanchel.

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