Justicia ordena cerrar el Registro Mercantil a las empresas que no entregan cuentas desde 1994

Los registros mercantiles no deben inscribir documentos presentados por empresas que no hayan depositado sus cuentas de 1994 en adelante. Así lo indica una resolución de la Dirección de Registros y del Notariado del Ministerio de Justicia. El depósito de cuentas es obligatorio desde 1990. Las consecuencias del cierre del registro mercantil son importantes. Las empresas afectadas no pueden inscribir ampliaciones de capital, poderes a directivos y cambios de domicilio o de estatutos, lo que convierte estos actos en nulos frente a terceros.

Un registrador explica el impacto de esa medida con un ejemplo: "Cuando una empresa solicita un crédito bancario, las entidades suelen pedir la inscripción de los apoderados en el Registro Mercantil, y si no lo están niegan el crédito".La resolución de Justicia ha provocado una situación de confusión. Los registros de Barcelona, Vizcaya, Navarra y Zaragoza ya han empezado a negar las inscripciones a las empresas incumplidoras. Otros, como los de Madrid, Valencia o Sevilla, aún no han adoptado la medida. También ha cogido por sorpresa a registradores y empresas y se anticipa a un cierre previsto para los próximos meses cuando el Gobierno apruebe el reglamento del Registro Mercantil.

El director general de Registros, Luis Cabello de los Cobos, se ha encontrado con una resolución comunicada el pasado 26 de abril por su antecesor, Julio Burdiel. Cabello de los Cobos afirma que el reglamento que regulará el cierre está listo y puede ir a Consejo de Ministros "en muy poco tiempo". El director general dice que "puede producirse la situación de que unos registros se cierren y otros no, pero cuando se apruebe el reglamento todos quedaran afectados". Y añade: "La aprobación del reglamento del registro es urgente".

La resolución de Justicia fue comunicada a los registros a primeros del pasado mes de mayo. En ella se da la razón al Registro Mercantil de Navarra, que denegó el depósito de las cuentas de 1994 a la empresa Industrias Alimentarias de Navarra por no haber depositado las de los cuatro años anteriores. Lo que ha sorprendido es que Justicia haya aprovechado la resolución para dejar claro que no es necesario esperar al reglamento y que con el artículo 221 de la nueva Ley de Sociedades Anónimas en la mano se puede negar la inscripción de documentos a las empresas que no hayan entregado las cuentas de 1994 sin esperar al reglamento.

Se calcula que existen alrededor de 150.000 sociedades en todo el país que no entregan sus cuentas al registro mercantil.

Sí se acepta la inscripción de los ceses de los administradores y la revocación de sus poderes, dicen registradores consultados. Con ello se quiere garantizar el derecho de los que dejan la empresa.

El registro de Vizcaya no acepta inscripciones de empresas que no hayan, depositado sus cuentas de 1994, cuyo plazo de entrega acabó en julio del año pasado. El registrador de Vizcaya, Javier Aznar, afirma: "La resolución es clarísima y ya la estamos aplicando". En el registro de Vizcaya hay 16.000 empresas inscritas, de las que alrededor de 4.000 no cumplen la obligación de depositar sus cuentas.

En el Registro Mercantil de Barcelona, donde figuran inscritas cerca de 100.000 sociedades, sus responsables confirman que han decidido el cierre. "No es un cierre, es una autoexclusión para los que no cumplen", matizan fuentes de este registro. Se calcula que en Barcelona hay 15.000 sociedades que no cumplen la obligación de depósito de cuentas.

Operaciones nulas

El presidente del Colegio de Registradores de la Propiedad y Mercantiles de Cataluña, Fernando Méndez, recuerda que las operaciones no registradas "son nulas de pleno derecho ante terceros". "Un apoderado no lo es si no está inscrito y una ampliación de capital, tampoco". "Espero que el reglamento vaya urgentemente a la comisión de subsecretarios y la apruebe el Consejo de Ministros". Otro registro, el de Zaragoza, también confirma que ha seguido las directrices de Justicia, dice su responsable, Julián Muro.El cierre no se aplica, de momento, en el Registro Mercantil de Madrid, el más grande del país, con unas 120.000 empresas activas, de las que unas 20.000 no entregan sus cuentas. Tampoco en el de Sevilla. Otros más pequeños están a la espectativa. "Creemos que es mejor esperar a que el Gobierno apruebe el reglamento del registro. Por unas semanas más no vale la pena", afirma el registrador de Madrid, José Antonio Calvo. "Lo que está claro es que, a partir del 31 de julio [plazo máximo para presentar las cuentas de 1995], este registro se cerrará para las sociedades que no hayan cumplido. "Y se pedirán también las cuentas de 1994", añade Calvo.