Acuerdo unánime en el Senado para que una ponencia estudie la reforma de la Constitución

El nuevo clima político, tras los pactos entre el PP y los nacionalistas, está facilitando el consenso. El Senado es uno de los principales beneficiados de la nueva situación. Ayer la Cámara Alta decidió por unanimidad la creación de la ponencia para llevar adelante la reforma constitucional que haga del Senado una cámara territorial, así como la profundización del uso de las lenguas de las autonomías en la misma Cámara. Los recelos de la legislatura pasada entre el PP y los nacionalistas impidieron que se consumara un acuerdo sobre ambas cuestiones.

Ayer fue el nuevo portavoz del PP en el Senado, Pío García Escudero, quien propuso la creación de la ponencia para hacer del Senado una cámara territorial. García Escudero sólo puso como condición para llevar adelante esta reforma la participación de todos los partidos y su limitación al artículo tercero de la Constitución, esto es, el referente a las relaciones entre el Congreso y el Senado. Aclaró que el título octavo, referente a las autonomías, no debía ser tocado.El aviso de la unanimidad iba dirigido al PNV, el partido que más reservas ha mostrado a esa reforma por temer que una transformación del Senado en cámara territorial difuminaría la relación bilateral que desde el Gobierno vasco quiere mantener con la Administración central.

Joseba Zubía, portavoz del PNV en el Senado, cogió el guante del portavoz del PP y se comprometió a formar parte de la ponencia de reforma constitucional, con algunas reservas. Pidió que no se generen expectativas triunfalistas, pero reconoció que el momento político era favorable para su creación. El propio Zubía citó la figura del profesor Francisco Tomás y Valiente, recientemente asesinado, que realizó importantes aportaciones a la anterior ponencia de reforma. Zubía recordó que Tomás y Valiente también pidió prudencia así como la existencia de un clima político favorable para llevarla adelante.

La propuesta no fue ni siquiera votada y se aprobó por asentimiento de todos los grupos políticos. Las próximas semanas se constituirá la ponencia, a través de una reunión conjunta de las comisiones constitucional y de las comunidades autónomas de la cámara.

También el pleno dio el visto bueno por asentimiento a la propuesta del portavoz de CiU, Joaquim Ferrer, de profundizar en el uso de las lenguas de las comunidades autónomas, Catalán, euskera y gallego. Hasta el momento este uso está limitado al debate anual sobre el estado de las autonomías, a la sesión constitutiva de la legislatura y al envío de textos al registro de la Cámara. El PP fue en el pasado el partido más reticente a dicho uso, como consecuencia de sus propios vestigios históricos y de sus malas relaciones con los pártidos nacionalistas que siempre fueron los propulsores de esta fórmula.

Ayer el senador del PP José González Pons expresó la voluntad de su partido de llegar en el uso de las lenguas tan lejos como lo permita el consenso entre todas las fuerzas políticas. González Pons dijo que el PP afrontaba sin prejuicios la necesidad de que el Senado se adapte a la realidad autonómica de España.

También Mario Onaindía, en nombre del PSOE, defendió la necesidad de dicha profundización, con los únicos límites de la educación y del sentido común. Onaindía reconoció que también entre los socialistas se habían dado reservas a este uso de las lenguas pero admitió que había que superar estas situaciones y utilizó como precedente el debate sobre el estado de las autonomías de septiembre de 1994, donde el uso de las lenguas fue un "rotundo éxito".