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Anguita revela que Aznar le ofreció hablar de la mili y las pensiones

El presidente del Gobierno, José María Aznar, y Julio Anguita, coordinador general de Izquierda Unida (IU), se vieron el pasado jueves. Hablaron y en unas cosas se entendieron y en otras no. Pero ambos se mostraron dispuestos a discutir las diferencias y a buscar puntos de entendimiento. Ayer, en la reunión de la ejecutiva de Izquierda Unida, Julio Anguita desveló que el jefe del Ejecutivo le ofreció discutir sobre tres temas que parecen prioritarios de su acción de gobierno: el desarrollo del Pacto de Toledo en tomo a las pensiones de la Seguridad Social, el sistema de Sanidad pública y la posibilidad de un Ejército Profesional o lo que es lo mismo, la supresión de la mili.Julio Anguita recogió el guante. Ayer se lo contó a su Ejecutiva y encargó a los responsables de estas áreas en la coalición que se pusieran a trabajar sobre los tres temas y perfilaran la propuesta que en torno a ellos podía hacer Izquierda Unida. El coordinador general de la coalición explicó además que había encontrado al presidente del Gobierno abierto a discutir de todo, aunque había centrado su atención estos tres puntos.

El líder de Izquierda Unida mantuvo ante su ejecutiva posiciones muy similares a las ya defendidas públicamente al situar a la coalición frente al nuevo Gobierno del Partido Popular. Julio Anguita, por ejemplo, reiteró. que respecto al Partido Popular le "separa lo concreto, pero sin ningún apriorismo". Y volvió a reclamar una oposición hacia los actos de gobierno y no meramente hacia las siglas.

Sintonía con el PP

Era una respuesta de Anguita a la demanda que Juan Berga, del Partido Democrático de Nueva Izquierda (PDNI), había presentado ante la ejecutiva: que ante el silencio con que la izquierda -"y especialmente el PSOE"- estaba acogiendo la acción de gobierno del Partido Popular, Izquierda Unida mantuviera una actitud de conflicto hacia los populares. Juan Berga dijo que no sólo no se daba sensación de distanciamiento, sino que incluso la sensación era de sintonía entre ambas organizaciones.Pero para Anguita, las diferencias entre quienes hoy ocupan el palacio de La Moncloa y quienes la ocuparon son mínimas o inexistentes. Así que cuando la diputada renovadora Cristina Almeida (PDNI) reprochó al líder que no hubiera sido más duro al analizar ante los medios de comunicación su entrevista con José María Aznar para evitar, precisamente, esa imagen de cercanía a la derecha, Anguita replicó que no cambiaría la política que estaba llevando a cabo. Y el líder de Izquierda Unida dio una razón: no se cambia la política con el fin de "mantener las diferencias con la derecha y con los anteriores inquilinos de La Moncloa". Todos, es decir, el PSOE y el Partido Popular, son iguales en el corazón y el pensamiento de Anguita.

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