El ex Mínistro García Vargas declarará el lunes como testigo en un sumario de los GAL

El ex ministro de Defensa Julián García Vargas ha sido citado por el juez Baltasar Garzón para declarar en calidad de testigo el próximo lunes en el caso Oñaederra, en el que se investigan cuatro asesinatos de los GAL, informaron fuentes de la Audiencia Nacional. García Vargas ha sido citado para explicar por qué se dio una pensión vitalicia al ex sargento Enrique Dorado Villalobos, principal sospechoso de varias acciones de la guerra sucia contra ETA, después de que fuera expulsado de la Guardia Civil a raíz de haber sido condenado por el atraco a una boutique de Irún (Guipúzcoa).

El juez Baltasar Garzón recibió hace pocas semanas el expediente sobre la pensión del ex sargento Dorado Villalobos y el magistrado, según fuentes de la Audiencia, podría tratar de embargarla, habida cuenta de que Dorado figura como imputado en este proceso. El ex sargento ha sido señalado como autor del atentado contra los hermanos franceses Christían y Claude Olaskoaga, ocurrido en Biriatou (Francia) el 18 de noviembre de 1984, en el que resultó muerto el primero y gravemente herido el último.Garzón dispone de un colaborador espontáneo que ya ha declarado en varias ocasiones en el sumario 17/95, conocido como caso Oñaederra y que ha facilitado datos concretos sobre determinadas operaciones de la guerra sucia contra ETA. El juzgado ha adoptado medidas para proteger la identidad de este testigo secreto, que, según algunas fuentes, podría tratarse de un miembro del Cesid.

En el citado sumario ayer prestaron declaración el periodista de Interviú Andrés Sánchez Díaz y el ultraderechista Juan de Dios Rubio Gómez. El primero declaró que hace mes y medio tuvo una entrevista con Rubio sobre la guerra sucia. Según Andrés Sánchez, Rubio le dijo que era amigo íntimo del ex sargento Dorado y del cabo Felipe Bayo. Su relación comenzó en Euskadi y continuó en Guadalajara.

En la entrevista, que será publicada próximamente, Rubio le dijo a Andrés Sánchez que trabajó como mercenario en tareas de localización, vigilancia y seguimientos sobre guerra sucia, así que conocía directamente datos sobre los casos Lasa-Zabala, Zabaltza, Oñaederra, Olaskoaga y Urigoitia.El periodista dijo que Rubio le pidió dinero aunque precisó que todavía no le han facilitado ninguna cantidad porque la revista debe valorar la información proporcionada por el ultra. Sánchez agregó que tendrá que volver a declarar ante Garzón y que Rubio no aportó documento alguno. El ultraderechista declaró a continuación y, según su abogado, Alejandro Cóndor, negó las afirmaciones del periodista.

Por otra parte, el ex director general de la Guardia Civil Luis Roldán tiene ya escrito en un documento la declaración que piensa realizar ante el Tribunal Supremo y en la que lanza acusaciones contra tres aforados, previsiblemente Felipe González, José Barrionuevo y Narcís Serra. "Roldán siempre tira hacia arriba", declaró ayer José Luis Rodríguez Porto, abogao defensor del ex director de la Guardia Civil, quien añadió que si el juez Eduardo Móner o llama a declarar a su cliente, como desea el fiscal, presentan el texto como denuncia en el juzgado de guardia.

Roldán realizó ayer durante más de dos horas diversas puntualizaciones a las declaraciones que ha prestado estos días ante el juez Garzón. Según Rodríguez Porto, se trata de una declaración genérica que se está vertiendo en el caso Oñaederra, aunque no es porque Roldán conozca datos de la muerte de ese etarra. El letrado también precisó que o está previsto que Roldán sea citado de nuevo por Garzón ni ara declarar ni para participar en careos. José Luis Guardia, otro de los abogados de Roldán, firmó que las referencias a González, Serra y Barrionuevo as realizará en la comparecencia ante el Supremo, en el caso de que se produzca.

Luis Roldán ha pedido declarar ante Móner con el fin de revelar detalles sobre la guerra sucia contra ETA, aunque el fiscal el caso, Emilio Vez, no ve la utilidad de esa declaración. Roldán a declaró en el caso GAL para confirmar que Segundo Marey, en compañía del ex policía José Amedo y otras dos personas, habían pasado la frontera por el puesto de Dantzarinea (Navarra), el 4 de diciembre de 1983.

Para ayer estaba prevista la notificación personal a los generales José Antonio Sáenz de Sana María, Andrés Cassinello y Enrique Rodríguez Galindo del auto en el que se les declara incuIpados en el caso Oñaederra.