Indro Montanelli y Julián Marías, Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades

La categoría humanística y la talla intelectual del filósofo español Julián Marías y la ejecutoria honesta, independiente y comprometida con la libertad del periodista italiano Indro Montanelli fueron galardonados ayer, de forma compartida, con el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades en su 16 edición, dotado con cinco millones de pesetas. El acta del jurado subraya la "nítida y dilatada trayectoria intelectual" de Marías y la ejemplar biografía periodística de Montanelli como "espejo permanente de ética profesional".

El galardón será entregado por el príncipe de Asturias el próximo otoño en Oviedo. El novelista portugués José Saramago, el lingüista Emilio Alarcos, el jurista Joaquín Ruiz Jiménez y el Instituto Caro y Cuervo, de Colombia, resultaron finalistas. Concurrieron 33 candidaturas.La decisión del jurado se produjo al cabo de "difíciles y rigurosas" deliberaciones, según testimonio de varios de sus componentes, por el volumen y entidad de los candidatos. El empate entre Marías y Montanelli en la última votación fue resuelto, por decisión mayoritaria del jurado, con la concesión ex-aequo del galardón por quinta vez en los 16 años de historia de este premio. Es la primera ocasión en que accede a él una personalidad ajena a la comunidad hispanoamericana de naciones. La reciente reforma estatutaria permite conceder este premio, de ámbito. iberoamericano, a personas que, con otra nacionalidad, hayan contribuido al desarrollo moral, cultural o científico de España y la América Latina.

Del filósofo Julián Marías, discípulo de José Ortega y Gasset, y "una de las figuras más destacadas de la intelectualidad iberoamericana de este siglo", según el acta del galardón, el jurado destaca su "amplia proyección cultural y académica en numerosos países " y "a lo largo de más de medio siglo", así como la relevancia de "su obra literaria" y de "sus aportaciones al pensamiento actual". Entre sus méritos se subraya "la claridad y rigor de sus libros y ensayos", así como su "amplia labor periodística, de análisis y divulgación, llevada a cabo día tras día en múltiples medios de comunicación nacionales y extranjeros".

Indro Montanelli se ha hecho acreedor al premio por constituir "un ejemplo y un espejo permanente de ética profesional, independencia de criterio y defensa de la libertad" para "los profesionales de la comunicación de todo el mundo". Pero también se ha querido distinguir con esta concesión sus "servicios a la convivencia democrática a través de la comunicación", su "extraordinaria biografía periodística", el "esfuerzo por defender la pluralidad de los ffiedios", con la fundación de varias publicaciones, y su "arnplia obra de divulgación histórica, caracterizada por el rigor y la originalidad".

La candidatura del flilósofo, sociólogo, ensayista y académico de la Lengua, Julián Marías (Valladolid, 1914), finalista en varias ediciones precedentes, fue propuesta por el académico Rafael Lapesa. Marías es autor de más de 50 obras de gran relevancia intelectual, y ha sido fundador, del Instituto de Humanidades de Madrid, del que fue director. Es miembro de diversas instituciones académicas y filosóficas.

Indro Montanelli (Fucecehio, Florencia), fue corresponsal y columnista de Il Corriere della Sera y enviado especial de este diario italiano en los frentes bélicos de la guerra civil española y de la II Guerra Mundial. En 1974 abandonó este periódico por discrepancia con su nueva línea ideológica y fundó en Milán Il Giornale. En 1977 fue víctima de un atentado por parte del grupo terrorista Brigadas Rojas.

Montanelli es autor de varios ensayos y libros de divulgación histórica. El director de Radio Nacional de España, José Manuel Diego Carcedo, quien como jurado propuso su candidatura, calificó ayer a Montanelli como "el periodista más emblemático de lo que es y tiene que ser la profesión periodística". Otro miembro del jurado, el periodista Jesús de la Serna, presidente de la Federación de Asociaciones de la Prensa de España y director de la Fundación Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS, consideré "muy equilibrada" la decisión.