_
_
_
_
_

Los vecinos denuncian los bares de Huertas al fiscal de Medio Ambiente

Los bares de Huertas han sido escogidos por la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos (FRAVM) como cabeza de puente en su lucha contra la concentración de locales de ocio en zonas residenciales del centro de la ciudad. Ayer esta federación presentó una denuncia ante el fis cal de Medio Ambiente, en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, contra los bares del barrio de las Letras (comprendido entre las calles del Prado, León, Atocha y el Paseo del Prado) por la agresión acústica y medioambiental que representan en esta zona, protegida desde 1988. En este barrio viven cerca de 9.000 personas.

Más información
Los dueños de locales se sienten acosados

También se implica en la denuncia al Ayuntamiento, "por inoperancia, negligencia e incluso denegación de auxilio" a los vecinos afectados por los ruidos, según explicó José Antonio Jiménez, abogado de la federación. Según datos que la Federación asegura que ha cotejado con la Junta Municipal de. Centro, 31 locales de copas de los cerca de 250 que hay en, las 30 hectáreas que ocupa el barrio, carecen de licencia de apertura y de funcionamiento; 21 no tienen la de funcionamiento; 16 incumplen los preceptos de una zona medioambiental protegida, mientras que hay seis que "ni siquiera existen" para el Consistorio. Ayer, esta Junta Municipal no tenía disponibles estos datos.Algunos propietarios de bares situados en la propia calle de Huertas admiten que sólo disponen de una "licencia provisional". "Las definitivas parece que dejaron de darlas cuando lo de Alcalá 20 [la discoteca que se incendió en diciembire de 1983, donde murieron más de 80 personas]", protesta lino de ellos, cuyo local acumula varias infracciones por incumplimiento de horarios, según la FRAVM. "Cuando solicitas la licencia definitiva, no te contestan nada. No les interesa tramitarla porque así, te tienen pillado", dice.

"Es imposible dormir por las noches", lamentó Daniel Bernabéu, portavoz de los vecinos de Las Letras. "Al Ayuntamiento este tema se le ha ido de las manos", continuó, "no es normal que estén funcionando bares sin licencia y que no se pueda hacer nada, que la primera inspección llegue cuando lleva abierto cuatro años". "No estamos en contra de que se abran bares, pero en Huertas hay tal concentración, que sólo traen problemas", opinó este portavoz, después de describir los efectos agobiantes que producen, en los vecinos los ruidos de los bares, los coches y la gente que circula por las estrechas calles del barrio. "Las casas son antiguas y no tienen aislamiento contra el ruido, la gente es humilde y no pueden hacer obras para acondicionarlas", enumera Bernabéu. "Los que tienen que poner el remedio son los bares y el Ayuntamiento, hacer que se cumpla la normativa, porque muchos echan el cierre a las tres y siguen hasta que se va el último", remata.

Por su parte, el presidente de la Federación, Prisciliano Castro, recordó que otras dos zonas, Chamberí y Malasaña, padecen problemas similares.

Castro recalcó que la Junta Municipal de Centro "no ha hecho nada" a pesar de haber sido requerida por el Defensor del Pueblo y la Agencia de Medio Ambiente para que tomara cartas en el asunto y presionara a los bares "para que cumplan la legalidad". A esta Junta corresponde la tramitación de las sanciones, que después son aplicadas por la concejalía de Policía Municipal.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Su titular, José Ignacio Echevarría, aseguró que el Ayuntamiento "aplica las máximas sanciones posibles según la normativa actual". "Hemos hecho inspecciones, llegando a la clausura por un mes, pero la junta debería revisar los expedientes por si la acumulación de sanciones aconseja alguna clausura definitiva", propuso.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_