Derrota de la corrupción

Estados Unidos ha presionado con éxito a sus aliados para que dejen de subsidiar la corrupción. Para Ios Gobiernos de Europa occidental, es rutinario permitir que las compañías que pagan comisiones a funcionarios extranjeros para adjudicarse contratos se deduzcan esas comisiones de su base fiscal.La semana pasada, los países de la OCDE acordaron acabar con los sobornos deducibles. No se ha llegado tan lejos como querría Estados Unidos, que prohíbe totalmente el soborno a funcionarios de países extranjeros, pero es un primer e importante paso. Los países desarrollados prohíben el pago de comisiones dentro de sus fronteras, pero sólo en Estados Unidos es ilegal el pago de sobornos a funcionarios extranjeros. Esa noble postura sitúa en desventaja a las compañías estadounidenses cuando tienen que competir con empresas que no operan con esas limitaciones. ( ... )

Hasta el momento, Estados Unidos ha actuado de forma unilateral; ha perdido negocios, pero ha tenido una escasa influencia en el fenómeno de la corrupción. (...) La mejor forma de combatir la corrupción es presentar un frente unido. De ese modo se maximiza la presión sobre los Gobiernos que incurren en ella, sin que sufran por ello las empresas de ningún otro país.

Puede que las presiones de la Administración no acaben con el soborno en el extranjero, pero el enfoque multilateral es el adecuado.

17 de abril