Los mercados avanzan una nueva subida de la gasolina el sábado por la carestía del crudo
El precio de la gasolina volverá a subir esta semana, según todos los indicios, debido a la concurrencia de dos factores importantes en la determinación del coste final para el usuario: la elevación de los precios del petróleo, que de una media de 17 dólares por barril en 1995 ha pasado a 18,7 dólares desde enero a la primera semana de abril de este año, y la subida de los precios de las gasolinas en los mercados internacionales. Si se cumplen los pronósticos, el litro de la gasolina super que ahora cuesta 117,60 pesetas, se habrá encarecido en casi tres pesetas en las últimas cinco semanas, en una escalada de precios con pocos precedentes. Los expertos consideran que el precio tenderá a estabilizarse las próximas semanas.
El sábado de la semana pasada, el precio de la gasolina súper quedó fijado en 117,60 pesetas por litro, 6,20 pesetas más que a primeros de año y 2,40 pesetas acumuladas en las últimas cuatro semanas. Si se cumplen las expectativas suscitadas a partir de las cotizaciones del viernes pasado y el lunes, volverá a subir el próximo sábado, 20 de abril, por novena semana consecutiva, y acumulará un aumento de precios sin precedentes, en torno a las tres pesetas en cinco semanas, excluidos los periodos de aumento de impuestos.Las causas de esta progresión en el encarecimiento de las gasolinas han sido estudiadas con detalle tanto por las autoridades energéticas como por los operadores de las compañías. Para tener una idea del origen de las presiones que están elevando los precios de las gasolinas baste decir que, según cálculos del Ministerio de Industria, del aumento del precio registrado la semana pasada (70 céntimos por litro), el 47,9% es atribuible al aumento de los precios en los mercados internancionales (Rotterdam y Génova) y el 49% a los precios de los productos en moneda local.
El tipo de cambio jugó a la contra, de forma que, si los precios de los productos se hubiesen mantenido neutrales, las variaciones en la cotización de la peseta respecto al dólar hubiera abaratado el precio de los combustibles el 0,8%; y la cotización de la peseta respecto al resto de monedas abarató los precios el 0,4%.
Los precios de las gasolinas y los gasóleos se calculan cada semana en la Dirección General de la Energía mediante la aplicación de una fórmula que tiene en cuenta la cotización del crudo, de los precios de los productos en los mercados internacionales, del precio de esos mismos productos-en moneda local- en seis países europeos y las variaciones en el tipo de cambio peseta-dólar y peseta respecto a otras monedas). De forma que el precio de los combustibles en España se ajusta a los vigentes en Europa... con una semana de demora.
Presión sobre el crudo
La evolución del precio del crudo, factor decisivo en el encarecimiento de la gasolina, está sufriendo una fortísima elevación impulsado por las expectativas de un acuerdo para el levantamiento del embargo petrolero impuesto a Irak. El pasado lunes, por ejemplo, los contratos de crudo para mayo se elevaron hasta los 25,05 dólares por barril, después de alcanzar los 25,45 dólares la semana pasada. Los precios se han disparado porque, en un principio, las grandes compañías petroleras dilataron todo lo posible la renovación de las reservas estratégicas a la espera de un abaratamiento del precio inducido por el levantamiento del embargo a Irak, todavía no decidido. Como el acuerdo se ha retrasado, las petroleras están acumulando una demanda fuerte de crudo en un breve espacio de tiempo, lo cual ha generado escasez en los mercados, con el consiguiente aumento de los precios.Este drenaje de la oferta ha, sido notable. Los expertos calculan el déficit en el mercado en 1,7 millones de toneladas durante la semana pasada. No obstante, conforme se vaya completando la renovación de stocks, el precio del crudo tenderá a estabilizarse en las próximas semanas. El precio medio, marcado ahora en 18,7 dólares por barril en lo que va de año, debe descender hasta aproximarse a los 17 dólares, según los operadores. El descenso en los precios de las gasolinas llegará, según la fórmula, con una semana de retraso.
Mientras, los gasóleos están ya en una senda descendente. La semana pasada bajaron 1,10 pesetas por litro, por el descenso de la demanda una vez que ha transcurrrido el invierno. Las persepectivas son de ligeros descensos.
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