_
_
_
_

Europa no quiere que se mencione a Irán en la declaración final de la cumbre

ENVIADO ESPECIAL Estados Unidos y Europa tienen el mismo objetivo en Oriente Próximo, pero divergen sobre cómo alcanzarlo. Todos intentan que el proceso de paz árabe-israelí no descarrile tras los últimos atentados, pero Washington considera a Irán culpable de los embates terroristas que sufre y pretende castigar con más dureza a la república islámica, mientras que la Unión Europea (UE) se resiste a apretar más las tuercas y desea mantener el "diálogo crítico" que inició con Teherán en 1992.

La reunión de los líderes occidentales y árabes que se celebra mañana en Sharm el Sheij (Egipto), bajo la doble presidencia del norteamericano Bill Clinton y del egipcio Hosni Mubarak, concluirá con una declaración de ambos consensuada con los demás participantes. Los altos funcionarios estadounidenses que la preparan han barajado la posibilidad de mencionar a la república islámica de. Irán como responsable de la violencia que padece Israel, pero los europeos se resisten.

El texto sí hará un llamamiento a ahondar la cooperación antiterrorista, pero la precipitación con la que ha sido preparada la reunión impedirá, probablemente, adoptar medidas prácticas. Prueba de la improvisación con la que se organiza es que las cartas de invitación de Clinton y Mubarak no coinciden. El primero convoca a una "conferencia de apoyo al proceso de paz y contra el terrorismo en Oriente Próximo", mientras el segundo lo hace a una "cumbre de los artífices de la paz en Oriente Próximo".

[La televisión estatal israelí difundió anoche los principales puntos del borrador de declaración común que debe aprobar la cumbre, informa France Presse. Según la televisión, que asegura haber obtenido el texto de la presidencia del Consejo de Ministros en Jerusalén, la declaración elaborada por EE UU y dada a conocer a egipcios e israelíes, contiene los siguientes puntos: 1) Los Estados participantes expresan su apoyo al proceso de paz en Oriente Próximo y su determinación de que éste haga avanzar la seguridad y la estabilidad hasta alcanzar una paz justa, global y duradera. 2) La denuncia todas las formas de terrorismo, cualquiera que sean sus motivaciones o sus autores. 3) El compromiso de una firme oposición al terrorismo. 4) La decisión de reforzar la cooperación y la coordinación entre Gobiernos, los servicios de seguridad y las policías para luchar contra los terroristas y 5) la intención de llegar a un acuerdo internacional para llevar a los terroristas a los tribunales.]

Londres y París dieron un toque de atención a los representantes iraníes y libios en sus capitales y también convocaron a los sirios, pero a estos últimos sólo les pidieron cooperación, 11 sin llegar a tirarles de las orejas", según la expresión de un diplomático. Otros Estados de la UE, como España, se negaron a regañar a Libia por considerarla ahora desvinculada del terrorismo islámico.

Ningún país de la UE está dispuesto a considerar la adopción de medidas adicionales contra Teherán que EE UU ha vuelto a sugerir tras los recientes atentados suicidas.

Estados Unidos desearía someter a Irán a un embargo similar al que padece Cuba pero, dada la posición geográfica de la república islámica, éste sólo le perjudicaría si contase con el aval de las principales potencias industrializadas.

Antes de la última oleada de atentados en Israel existían ya desavenencias entre Washington y Bruselas sobre Irán. El proyecto de ley Amato-Kennedy, que se aprobará la próxima primavera por el Congreso, prevé sanciones contra las empresas extranjeras que "exporten, transfieran o suministren a Irán bienes o tecnología" para la explotación petrolera o del gas por valor de 40 millones de dólares (4.800 millones de pesetas). En diciembre, la UE advirtió a Washington que si las aplican serán denunciadas ante la Organización Mundial de Comercio.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_