Gil subvencionó con 4,5 millones del Ayuntamiento de Marbella una reunión de más de 60 jueces en 1992
Los pagos, desconocidos hasta ahora, incluían cenas con vodka y caviar iraní
El Ayuntamiento de Marbella, gobernado por Jesús Gil, subvencionó con 4,5 millones una reunión que la Asociación Profesional de la Magistratura (APM) -mayoritaria y conservadora- celebró en 1992 en esta localidad y a la que acudieron más de 60 jueces. El gobierno municipal transfirió dos millones a la asociación y pagó la estancia de los magistrados durante tres días en un hotel de cuatro estrellas, más dos comidas con caviar iraní y vodka ruso.
Tres comisiones de gobierno del Ayuntamiento en las que sólo participan concejales del GIL -su partido- acordaron las subvenciones a la reunión interna de la APM, celebrada en Marbella en1re el 2 y el 4 de abril de 1992. La aportación de dos millones -a través de una transferencia bancaria- se gestionó con un informe de la interventora municipal, Isabel González, y la concedió la asesoría jurídica, que dirige el abogado personal de Gil, José Luis Sierra. Los otros 2,5 millones fueron tramitados por el concejal de Participación Ciudadana, Julián Muñoz, que presentó las propuestas a las comisiones de gobierno e informó a Sierra.La primera moción presentada por Muñoz solicitaba un millón y medio para las jornadas por "la importancia que supone para el desarrollo de nuestro proyecto". Sin embargo, Muñoz ya daba por concedidos los otros dos millones "por la asesoría jurídica de este Ayuntamiento", a través de José Luis Sierra.
La APM, en un escrito a Muñoz y Sierra, fijaba en 3,5 millones los gastos de dietas y desplazamientos" sin contar el coste de 70 habitaciones dobles para el alojamiento "de los mismos y sus acompañantes" durante tres noches -dos días en régimen de pensión- y la sala de reuniones.
Muñoz tuvo que solicitar otra subvención municipal de un millón para cubrir los gastos generados durante la estancia. "Las expectativas de dichas jornadas se han visto superadas por una afluencia superior a la prevista", justificaba el edil.
12.000 por cubierto
Las facturas del hotel, de 2.274.056 pesetas, y de dos comidas, por más de 300.000 pesetas, superaban con creces el primer millón y medio obtenido por el concejal de Participación Ciudadana. Una de estas comidas, servida en un restaurante de Puerto Banús a 19 participantes de las jornadas, le costó al Ayuntamiento más de 12.000 pesetas el cubierto; en ella se tomaron, entre otras viandas, cigalas a la parrilla, caviar iraní y vodka ruso.La subvención de dos millones era conocida por Rodríguez Arribas, según otra nota de Muñoz. Esta cantidad fue transferida a una cuenta de la APM,'a través de otra que el Ayuntamiento tiene en una su-cursal bancaria de Puerto Ba,nús, el 25 de marzo de 1992.
Diversas asociaciones jurídicas reconocen como normales este tipo de subvenciones, aun que a Jueces para la Democracia le parece "alta" la ayuda de Gil. Más contundente se muestra, Antonio Morales, de la Unión Progresista de Fiscales, que entiende "exagerada y criticable" esta. subvención y su aceptación por "quienes tienen que estar alejados de las ostentaciones".
A la oposición municipal, que no participó en el debate de las subvenciones al no formar parte de las comisiones de gobierno, le pasaron inadvertidos estos acuerdos. La portavoz socialista, Isabel García Marcos, califica de "irregular" la concesión de ayuda y entiende que debían haberse aprobado en pleno municipal: "Da pie a que los ciudadanos puedan pensar que se establecen relaciones que van más allá de lo institucional y pueden condicionar la independencia judicial".
Más información en la página 47
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