La oposición cubana denuncia la detención de 50 disidentes

Varios grupos disidentes cubanos denunciaron ayer que las autoridades de la isla han detenido en los últimos cinco días a medio centenar de opositores y activistas de derechos humanos, de los cuales cerca de 30 continuaban ayer retenidos.En un comunicado entregado ayer en la Embajada de Italia en La Habana, los líderes más conocidos de la disidencia afirman que la causa de estas detenciones es la reunión que el próximo 24 de febrero tenían previsto celebrar en la capital cubana representantes de las 130 organizaciones opositoras que integran el denominado Concilio Cubano, y piden a la Unión Europea que interceda por estas personas.

El comunicado está firmado por el presidente de la Comisión de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, Elizardo Sánchez; Gustavo Arcos Bergnes, secretario general del Comité Cubano Pro Derechos Humanos, y otros tres disidentes, quienes demandan la libertad de sus compañeros una vez que ya han desistido de celebrar el encuentro.

"Una vez que el Gobierno ha comunicado oficialmente a través de Gustavo Arcos Bergnes su decisión de no permitir la reunión de Concilio Cubano, y que se ha declarado que no estamos en disposición de hacer nada en contra de esta decisión, creemos innecesario que se mantengan detenidos los miembros de Concilio Cubano", afirman los disidentes en su escrito.

Fuentes diplomáticas de la Unión Europea indicaron que hasta ayer la troika de embajadores comunitarios (España, Italia e Irlanda) no había hecho aún ninguna gestión oficial ante el Gobierno cubano. Por el momento, las autoridades de la isla no han confirmado ni negado las detenciones, ni tampoco se han referido a la reunión que iba a celebrar Concilio Cubano. Tan sólo la agencia oficial de noticias Prensa Latina acusó el martes a Estados Unidos de intentar crear una "oposición fantasma" en el interior de la isla.

Sin referirse directamente a Concilio Cubano, Prensa Latina dijo que "Estados Unidos hace actualmente un postrer esfuerzo por articular una oposición interna en la isla", pero que no lo consigue por "la falta de representatividad de quienes integran esa oposición".

La semana pasada, mientras los líderes opositores preparaban el primer encuentro de Concilio Cubano, que se iba a desarrollar durante tres días en La Habana, existían dos corrientes de opinión sobre qué hacer si las autoridades prohibían la reunión explícitamente. Un pequeño grupo, en el que estaban Elizardo Sánchez, Gustavo Arcos y media docena más de disidentes -que son los más conocidos y los que siempre se reúnen con las delegaciones extranjeras que visitan la isla-, eran partidarios de suspender el encuentro.

El resto había advertido que se reunirían aunque existiese una prohibición gubernamental. Entre los 30 opositores que todavía ayer permanecían detenidos, había representantes de los dos grupos.