DOS MINISTROS BAJO EL TEMPORAL

El ministro de Defensa, Gustavo Suárez Pertierra, y diversas autoridades asturianas hicieron ayer una exhibición de estoicismo. A la intemperie, y de pie, aguantaron durante dos horas bajo un temporal de lluvia, viento y frío la llegada del ministro de Obras Públicas, José Borrell. Tan adversas condiciones fueron la causa de que se demorara durante tan dilatado periodo de tiempo el aterrizaje en Asturias del helicóptero en el que viajaba el ministro de Obras Públicas. El suceso ocurrió ayer entre los términos municipales de Cudillero y Valdés, durante la inauguración de un tramo de la nueva carretera de alta capacidad que recorre la franja costera del occidente asturiano y que facilita la comunicación entre el Principado y Galicia. El presidente del Gobierno asturiano, Sergio Marqués, y el del Parlamento autónomo, Ovidio Sánchez, ambos del PP, decidieron abandonar el lugar y regresar a Oviedo al cabo de más de hora y media de espera infructuosa bajo la tormenta. Al fin, Borrell y Suárez Pertierra procedieron a la inauguración con un único representante del Gobierno regional: el consejero de Fomento, Juan Alsina. El nuevo tramo de carretera, que ha supuesto una inversión de 8.900 millones de pesetas, ha permitido suprimir 150 curvas en apenas 13 kilómetros mediante la construcción de ocho viaductos, un túnel y un puente de más de 800 metros de longitud y 110 metros de altura que forma un impresionante arco sobre el río Cabo.-