Yeltsin no sabe, si contesta
., La explosiva situación de Pervomáiskoie fue creada por el incumplimiento del acuerdo alcanzado en las conversaciones mantenidas por los dirigentes de Daguestán y el comando de Salmán Radúiev en Kizliar. Esta es la principal conclusión que se extrae de las declaraciones hechas ayer por el ministro de Nacionalidades de Daguestán, Magomed Salij Gusáiev, quien participó en las negociaciones con Radúiev."Desde un comienzo, en Kizliar, llegamos al acuerdo de que permitiríamos que los combatientes chechenos abandonaran sin obstáculos Daguestán, junto con los rehenes, que serían dejados en libertad en territorio de Chechenia", declaró Gusáiev. "Pero en las cercanías de la frontera, en las afueras de Pervomáiskoie, la caravana fue detenida y rodeada por las tropas federales".
Esto significa que el presidente ruso, Borís Yeltsin, había sido mal informado, ya que el miércoles acusó a los guerrilleros de incumplir el acuerdo que, según él, consistía en liberar a los rehenes al llegar a la frontera y no en territorio checherio. El propio Yeltsin explicó que las negociaciones las habían llevado los dirigentes de Daguestán, por lo que no puede haber error en las palabras de Gusáiev. También reflejo de lo mal informado que está el presidente fue la reprimenda que dio el martes ante las cámaras de televisión a los generales, y especialmente al jefe del Servicio Federal de Guardafronteras, Andréi Nikoláiev. Primero, el presidente habló de "dos fronteras", como si entre Chechenia y Daguestán hubiera alguna otra república o una tierra de nadie, y segundo, acusó a los soldados de Nikoláiev de haberse "quedado dormidos", cuando ellos no eran responsables de la zona de Kizliar, que está a cargo de las tropas del ministerio del Interior.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.