Agradecimiento

Tras haber visto en un telediario las primeras imágenes del nuevo corto que creo de Trueba, quisiera como zaragozano escribir unas líneas de agradecimiento. En nuestra ciudad, desde finales del siglo pasado, un cúmulo de colectivos e individuos han dedicado su energía a contrarrestar los excesos que cualquier Gobierno comete al ejercitar sus atribuciones. Más de una vez, desde Martí a nuestros insumisos de hoy, pasando por decenas de reuniones obreras y acciones populares, los gobernantes de la carrera de San Jerónimo han sufrido las consignas, ideas y quebraderos varios expandidos desde tabernas de la calleja de San Lorenzo: cuando el 98 estaba aún por caer, esas calles acogían tanto al hombre que manifestó, gestando la independencia de Cuba, como al que con el que nos redimió ganando el Nobel para la ciencia española.Allí, cuando fue necesario, se protegió y ejecutó la consolidación ideológica de la Confederacíón atravesando momentos que fueron críticos. Allí, en estos mismos barrios, se construyen hoy boletines, libertarios electrónicos para las autopistas de la infórmación, o se debaten estrategias de antimilitarismo e insumisión, por poner sólo un par de ejemplos.

Con el peso de cien años, el director, en su Salida de un insumiso de la cárcel de Zaragoza vista a través del objetivo de los Lumière, homenajea no sólo al aragonés que filmó la primera película española; también con ello incluye a todos los zaragozanos que a lo, largo del siglo han querido hacer rodar un mundo más justo.

Y para aquellos que nos dábamos por felices porque el año del centenario del cine nos dejaba una melancólica bandera rojinegra y un templo del mal en cristal y acero, se nos añade al mosaico la puerta de una cárcel en mudo blanco y negro, que nos rescata de la ficción y la memoria para traernos a la, realidad, y al hoy. Que lluevan más centenarios como éste.

Muchas gracias.-