"La plaza Mayor está ahora en la Castellana
Cuando se le pregunta a esta periodista la edad, responde que nació el "30 de febrero" y que con eso vale. Tampoco en el libro que acaba de publicar, El Madrid de Juan Carlos I, aparecen por ningún lado los años de la autora. Lo que sí contiene el volumen es la crónica de Madrid desde 1975. Crónica porque quien firma el libro no es ni historiadora ni investigadora, sino periodista de información local desde que en 1964 entró en el Ya procedente. de Huelva, donde nació. En la redacción de ese periódico estuvo hasta que en 1982 se hizo cargo, juntos a otras personas y hasta 1986, de las relaciones, públicas de la recién estrenada Asamblea de Madrid. Desde 1991 trabaja como periodista "independiente". Le gusta hablar. De su libro, pero sobre todo de su trabajo de cronista "pegada a la calle y a la gente".Pregunta. ¿Por qué el libro?
Respuesta. Porque he trabajado durante 30 años contando cosas de Madrid y porque creo que esta ciudad necesitaba una crónica de estos últimos años. Madrid ha cambiado mucho. Sigue siendo, eso sí, la Gran Plaza Universal, como dijo Tirso de Molina. Ahora bien, la plaza Mayor ahora está en la Castellana, porque, ahí se hallan la fibra óptica, las autopistas de la información, el I + D, las manifestaciones, las carreras de bicicletas, en una palabra, la convivencia total.
P. ¿Cúanto ha tardado en escribir su libro?
R. En redactarlo, tres años. Pero he utilizado las crónicas que escribí durante otros treinta.
P. ¿Qué problemas ve en la ciudad?
R. Que se están cargando los edificios viejos. Pero no este Ayuntamiento; todos los que ha habido. Yo veo bien que pongan bloques modernos, pero no en lugar de los antiguos. Otro error de los sucesivos ayuntamientos de Madrid ha sido el de no conseguir que se sienta cariño por su ciudad. Las instituciones no saben integrar al madrileño en su propia siudad.
P. Y ese madrileño con el que a usted le gusta tanto hablar ¿Cómo es?
R. Pues como todo habitante de una gran ciudad: soporta el paro, la droga y la inseguridad. Y eso le hace más receloso. En ese aspecto ha cambiado desde hace tres décadas. Eso sí, también es más solidario que en los años sesenta.
P. ¿Cómo ve ahora las secciones de local de Madrid?
R. Excesivamente politizadas. No hay que dar tanta importancia a los políticos. En mi libro, yo no los saco. Y tiene 332 páginas. Hay mucho Fulano dice y el otro replica. y eso no es sólo de las secciones de local, sino de todo el periodismo. Otro fallo que le veo es el de no ser muy participativo. No se trata sólo de contar problemas; hay que intentar solucionarlos.
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