Fraga acusa a los nacionalistas de promover la "guerrilla urbana"

El presidente de la Xunta, Manuel Fraga, desató ayer la cólera de los nacionalistas gallegos, a los que comparó con Herri Batasuna (HB) y les acusó de promover "una especie de guerrilla urbana organizada". Fraga particularizó sus ataques en el Bloque Nacionalista Galego (BNG) y en lo que llamó su "brazo armado", el sindicato Confederación Intersindical Galega (CIG).Las ásperas batallas dialécticas entre los nacionalistas y Fraga son el pan de cada día de la política gallega, pero la escalada verbal nunca había llegado a los límites alcanzados ayer. El estupor de los nacionalistas fue creciendo tras conocer las duras acusaciones formuladas por Fraga al término de la reunión semanal de su Consejo de Gobierno y el BNG incluso intentó sin éxito que se suspendiese el Pleno del Parlamento autónomo que debatía los presupuestos de la Xunta para 1996. "Es una desgracia estar gobernados por un fascista", gritó indignada desde la tribuna de oradores de la Cámara la diputada del BNG Olaia Fernández.

Para justificar sus ataques, Fraga relacionó diversos hechos ocurridos en los últimos días: las violentas protestas de pescadores y mejilloneros, los contactos descubiertos por la Policía entre Jarrai y grupúsculos radicales gallegos y la actitud del BNG en el Ayuntamiento de La Coruña, que se negó a suscribir un comunicado del alcalde, Francisco Vázquez, de condena a los últimos atentados de ETA porque, aunque decía "compartir su espíritu", no estaba de acuerdo con las alusiones a HB "por ser una organización legal". Según Fraga, todo esto prueba que detrás de la "aparente moderación" del BNG se esconden prácticas de "guerrilla urbana". "Se están poniendo a la altura de HB", sentenció el presidente de la Xunta.

El líder nacionalista Xosé Manuel Beiras llamó a Fraga "energúmeno" y reiteró su rechazo a los métodos violentos. "Es Fraga, por su biografía política, y no el BNG, el que tiene que hacer autos de fe democrática", replicó Beiras.