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Los estafadores entran por vez primera en la telefonía móvil

Javier Casqueiro

La Guardia Civil desconectó este fin de semana la primera y más importante red de clonaje (copia exacta) de teléfonos móviles de España. El plagio de miles de números sirvió a una banda de delincuentes extranjeros, dirigidos por dos senegaleses desde Valencia, para cometer una estafa a la Compañía Telefónica, desde 1994, por valor de más de 1.600 millones. El alcance puede ser aún mucho mayor, porque la banda funcionaba en España desde hacía dos. años y medio, y servía de soporte también para encubrir los contactos internacionales de operaciones de contrabando, narcotráfico y compraventa de divisas con Latinoamérica e, Italia. « 'Según la Guardia Civil, las ,llamadas. ilegales nunca se llegaron a cargar a los usuarios le gales, porque Telefónica sospechó de la estafa al comprobar los ilógicos incrementos en las facturas. La Operación desconexión ha incluido 41 detenciones y el registro de - 17 pisos con. locutorios clandestinos -13 en Madrid y 4 en Valencia-, y en realidad se inició el pasado 6 de febrero. Pues entonces cuando Telefónica confirmó sus sospechas de que estaba siendo gravemente estafada. Tras la denuncia de la compañía, la Guardia Civil comenzó sus investigaciones, que situaron sus primeras pesquisas en julio por tierras de Almería. Allí se detuvo a los, seis primeros sospechosos. Luego, en Madrid cayeron otro! dos. Entre las 41'personas' que la Guardia Civil ha puesto ahora a disposición del Juzgado número 3 de la Audiencia Nacional, que dirige Miguel Moreiras, figura sólo un español, un legionario en la reserva activa. El resto son extranjeros -7 peruanos, 1 somalí, 1 hondureño, 4 ecuatorianos, 9 colombianos y 18 senegaleses que tenían como misión extender la red de venta y alquiler de estos teléfonos ilegales hacia conciudadanos de sus países de origen.Entre los primeros detenidos se hallaban ya varios senegaleses, que se han confirmado ahora como los cabecillas de la red. La Guardia Civil ha concluido de sus investigaciones que M. Diop y H. Diop, de 39 y 37 años, actuaban como cerebros de esta banda. No son hermanos pero sí seguramente familiares. Residen en Valencia y. disponen de papeles para justificar su estancia legal en España. Los investigadores se han sorprendido de su formación, tanto por los conceptos electrónicos que dominan como por el número de idiomas que manejan. Hablan español,, francés, inglés, italiano, y su lengua autóctona, el wolof.

El clonaje de teléfonos móviles no es una actividad especialmente complicada para los expertos. La operación consiste, básicamente, en introducir un microprocesador en un aparato móvil que permite efectuar llamadas desde 40 teléfonos distintos con ese mismo número. Ese número originario y su código -correspondientes a un particular o una empresa- son conocidos y comprados, así como un largo listado de cientos o miles, en el mercado negro. Los teléfonos falsos se manejan sólo en el mercado negro entre extranjeros.

La Guardia Civil -que ha ocultado datos técnicos para no facilitar nuevas estafas- se ha quedado asombrada del funcionamiento extremadamente jerarquizado de esta banda, donde predominan los senegaleses: "No tienen sentido de familia, sino de clan. El que manda, manda; y los demás obedecen sin rechistar. Nunca se meten en asuntos violentos. Son, por su formación, más de otro tipo de delitos más técnicos".La mayoría de los detenidos por el clonaje ' de teléfonos móviles son de la tribu wolof, que se organiza por castas (nobles, cultivadores y artesanos). Casi la mitad de los senegaleses son wolof y el 70% de la población del país -uno de los más avanzados de África Central- habla esta lengua. En España hay 7.000 ciudadanos de Senegal. Son mayoritariamente musulmanes y pueden tener varias esposas.

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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