El Congreso rechaza las enmiendas de totalidad a la ampliación del aborto

El proyecto de ampliación de los supuestos de despenalización del aborto dio ayer un paso al rechazar el Congreso las enmiendas a la totalidad que habían presentado el Grupo Popular y el de Convergència i Unió. El proyecto seguirá su tramitación, ya que las enmiendas fueron rechazadas con 170 votos en contra del Grupo Socialista, IU-IC y ERC, frente a 150 votos que consiguieron contra el proyecto el PP, CiU y un voto de Coalición Canaria. Los cinco diputados del PNV se abstuvieron, así como uno de Coalición Canaria.

La defensa del proyecto le correspondió a la ministra de Sanidad, Angeles Amador, porque el titular de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, estaba ausente. De manera que la ministra leyó un texto en el que aseguró, entre otras cosas, que el proyecto de ley "no es abortista. Ninguno de los existentes en nuestro entorno lo es, y por ello, y por convicción", dijo la ministra, "el nuestro no podría serlo tampoco". A su juicio, se trata "únicamente de afrontar una situación de conflicto grave que es hoy real en nuestra sociedad".Mercedes Fernández, en nombre del Grupo Popular, defendió la devolución del proyecto tras negar que haya existido debate social sobre este problema, y afirmar que existe "una disociación total entre el debate en la sociedad. española y un Gobierno que se hace eco de determinadas pretensiones que no se plantean de forma generalizada en la sociedad española en estos momentos".

Defensa del PSOE

En nombre de CiU fue el diputado Jaume Cardona quien defendió la necesidad de que el proyecto fuese devuelto al Gobierno, y a ambos se opuso la diputada socialista, Carmen del Campo, para la que "el proyecto de ley que ha presentado el Gobierno a esta Cámara no es una muestra de pasotismo ni de inhibición, no es ningún cúmulo de deficiencias ni de incoherencias, sino", prosiguió, "un trabajo que busca compaginar mejor que la ley vigente la obligación del Estado de tutelar la vida con la defensa de los derechos de la mujer".El debate, que hasta ese momento no había salido del vuelo rasante y repetitivo en torno al problema del aborto, subió de tono cuando el diputado vasco Emilio Olabarría se encaramó a la tribuna e hizo un despliegue de brillantez jurídica y parlamentaria para defender la abstención de su grupo. Reprochó con dureza a la ministra que hubiese vinculado al debate el problema de las mujeres en las cárceles, porque, dijo Olabarría, "ésta no es la raíz conceptual del problema ni jurídica ni políticamente". El diputado vasco recordó que "el aborto siempre se contrae a acabar con una vida humana y esto hay que decirlo así, sencillamente porque no tiene ningún tipo de connotación peyorativa en sí mismo, ya que acabar con una vida humana no siempre es una actividad punible o que tenga relevancia para el derecho penal":

Olabarría recordó que el propio Código Penal dice que "hay una vida humana que debe ser objeto de tutela penal, pero que, en determinados casos, su destrucción no debe ser punible".

El diputado vasco alertó de la posibilidad de que "bajo una rotulación de la ley aséptica y no escandalosa, lo que estemos consignando sea el inconstitucional y posiblemente aborto libre, puesto que en 12 semanas de gestación la madre podrá interrumpir libremente el embarazo".

La ponencia para informar el proyecto de ley del aborto se reunirá hoy mismo, aunque el PP se ha opuesto a que el proyecto se incluya en el pleno de la próxima semana.

El pleno del Congreso aprobó ayer, con carácter definitivo, tres importantes proyectos que volvían del Senado: la ley de ayudas a víctimas de delitos violentos, la ley de contrabando y la que crea el fondo de bienes decomisados por tráfico de drogas para destinarlo a la prevención y represión del narcotráfico.