Tráfico y las aseguradoras cruzarán datos sobre el parque de automóviles para evitar fraudes

JORGE RIVERA / XAVIERHORCAJO Las aseguradoras y Tráfico cruzarán los datos que poseen sobre el parque automovilístico para identificar los casi 1,5 millones de coches que circulan sin seguro. Ese cruce de datos servirá para controlar los fraudes que se cometen con las pólizas de los vehículos y que, según las compañías, tiene un coste de 100.000 millones anua les. El Fichero de Información de Vehículos Asegurados (FTVA), contemplado en la Ley del Seguro recientemente aprobada, está listo para entraren vigor al inicio de 1996. El único problema por solventar es cómo hacer compatible el funcionamiento del fichero sin vulnerar la legislación sobre protección de datos.

El grupo de trabajo constituido entre la patronal aseguradora, Unespá, y Tráfico para fijar un programa de actuación conjunto destinado a mejorar la seguridad vial y a ayudar, en la detección de fraudes está, a punto de dar su primer fruto, el FIVA. El funcionamiento de ese fichero es relativamente sencillo. En él se verterán los datos en poder de todas las compañías aseguradoras del país y los que obran en poder de Tráfico. En estos momentos hay alrededor de 17,5 millones de vehículos asegurados, 13,4 de los cuales son turismos.El primer contraste provisional de este dato ha permitido calibrar que casi 1,5 millones de vehículos dados de alta en Tráfico no tiene seguro. "Ello no quiere decir", precisa el responsable de la comisión de seguro del automóvil en Unespa, José Boada, "que todos estén circulando. Creemos que muchos de ellos están simplemente fuera de uso, pero sus propietarios no los han dado de baja. Aún así, la cifra es preocupante, puesto que rebasa el millón". En este caso, además, Tráfico podría determinar quién incumpié la ley, pues todo vehículo que circula debe tener un seguro obligatorio.

El fichero agilizará la identificación de ese parque de vehículos que transitan sin seguro y "evitará en buena medida que se den casos en los que hay un accidente con consecuencias graves y no hay ningún responsable solvente que lo cubra señalan fuentes de la comisión que desarrolla el FIVA.

Al margen de este trasvase de información con Tráfico, el fichero servirá para que las compañías aseguradoras también se entrecrucen datos. El fin de este segundo uso es intentar evitar los diversos fraudes que se cometen en el proceso de declaración del siniestro y de su posterior reparación. Fuentes de Unespa manifiestan que estos fraudes -partes duplicados, siniestros simulados, connivencias con peritos o con talleres- supone a las compañías un coste global cercano a los 1000.000 millones de pesetas anuales. Además, la medida persigue que las aeguradoras estén advertidas de clientes con un alto número de siniestros a sus espaldas.

Dudas jurídicas

De acuerdo con el calendario de la patronal del seguro, que está presidida por Álvaro Muñoz, el fichero entrará en funcionamiento a principios del año próximo. "Lo único que está retrasando su entrada en vigor es su posible choque con la legislación sobre protección de datos, a pesar de que la creación del fichero está contemplada en la Ley del Seguro, aprobada por el Congreso el pasado mes de octubre", señalan fuentes del sector.

Una de las soluciones manejadas, para que el fichero sea jurídicamente viable es que en él sólo aparezcan datos como la matrícula, el modelo y la descripción del vehículo, y la compañía que lo asegura. De esa forma, los datos personales sólo estarán en manos de la aseguradora elegida por el usuario y no en posesión de toda la red. Fuentes jurídicás consultadas creen que la creación y aplicación de este fichero podría llegar a plantear dudas sobre su constitucionalidad.

La polémica también afecta a otras innovaciones introducidas en la Ley, del Seguro. Representantes de diversas compañías la califican de intervencionista, debido al nuevo marco que permitirá actuar en una empresa a la Dirección General de Seguros. Según el artículo 11 del nuevo texto legal, "un déficit superior al 5% en el cálculo de cada una de las provisiones técnicas individualmente consideradas", con la excepción de las provisiones técnicas por prestaciones que será del 15%.

La nueva ley establece un mínimo de capital de 1.500 millones de pesetas para las compañías de seguros de vida, responsabilidad civil o reaseguros; 350 millones para las de accidentes, enfermedad o decesos y 500 millones de pesetas para las restantes. Las cesiones de carteras estarán prohibidas para entidades que no ocupen el, mismo renglón de categoría, por ejemplo, entre aseguradoras y mutuas de previsión. También se alteran los porcentajes de contribución a la Comisión Liquidadora de Entidades Aseguradoras, a la que ahora deberán aportar un cinco por mil de las primas.

En el terreno fiscal, la nueva ley aporta importantes novedades en las deducciones por seguros. La más destacable es la que obliga a los profesionales a globalizar los pagos a mutualidades de previsión y las aportaciones a los planes de pensiones.