Un cura italiano pide la fecundación 'in vitro' para su compañera
Un anónimo -sacerdote italiano que no puede engendrar hijos de manera natural- corre el riesgo de ser secularizado, al descubrirse que ha pedido la ayuda de un médico para poder fecundar in vitro a su compañera sentimental.
El hecho ha sido hecho público por el famoso ginecólogo Severino Antinori, uno de los pioneros de la inseminación artificial, que ha logrado que mujeres sesentonas tengan hijos. Antinori sólo reveló ayer que el cura tiene 37 años, es guapo, ejerce como párroco en un pueblecito toscano y, desde hace cuatro años, mantiene relaciones sentimentales con una funcionaria pública de 34. La descripción es tan genérica que, salvo que el sacerdote lo decida, será imposible localizarle, pues en la región de Toscana hay 18 diócesis, 2.400 parroquias y 2.600 curas.
Antinori afirmó que el caso demuestra que hay sacerdotes favorables a estas técnicas para traer hijos al mundo y que "vuelve a abrir" el problema del matrimonio de los curas que, como el del caso, no quieren colgar los hábitos. "Sé que es una provocación, pero el cura me ha recordado que en el Antiguo y Nuevo Testamento está escrito creced y multiplicaos, pero no está especificado cómo", agregó Antinori. La respuesta de la Iglesia no ha tardado: el cardenal Ersilio Tonini ha usado palabras muy duras contra el sacerdote, y dijo que si un cura hace una cosa similar es que es un loco. "No sé si es verdad y si el sacerdote sigue en el seno de la Iglesia católica", indicó. "De todos modos es un tema muy delicado y de una gravedad increíble. Para mí es motivo de sufrimiento. Jamás pensé que se llegaría a tanto. Expreso mi profunda amargura por una noticia tan genérica y por el hecho de que un médico que se define católico recurra a esos instrumentos", manifestó Tonini.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.