Cerrada la residencia central de ancianos de la polémica Hermandad de la Cruz

La Consejería de Sanidad y Servicios Sociales de Madrid cerró ayer la sede central de los Hermanos de la Cruz y la Resurrección, que saltaron a la polémica la pasada primavera por haber tejido en España una red de residencias para acoger ancianos y enfermos que no reunía los mínimos Indispensables de atención y sanidad. Tras varios meses de espera ayer llegó el mandamiento judicial y funcionarios de la consejería procedieron a la clausura de la residencia, situada en la céntrica calle de Mesón de Paredes, y traslado de cuatro ancianos a centros de acogida de la Comunidad autónoma.Jesús Alcalá, principal responsable de la hermandad, que va vestido con hábitos blandos o azules y suele recorrer el centro de Madrid y el Rastro con pancartas de la Virgen para pedir dinero para su organización, no quiso ayer hacer ningún comentario sobre el cierre, y remitió a su abogado, Rafael Torreblanca.

Éste se limitó a decir: "No pienso decir nada a la prensa, ya han hecho ustedes suficiente daño".

Los vecinos de la casa de Mesón de Paredes declararon que habían sentido, tras diez meses de denuncias, un gran alivio con el cierre. Uno de ellos calificó a Jesús Alcalá de "mangante con hábitos". Y añadió: "Viven del engaño y del timo".

En mayo los gobiernos autónomos de Castilla-La Mancha y Aragón clausuraron cuatro centros de esta hermandad. La Comunidad de Madrid había decidido cerrar el centro de Mesón de Paredes el 23 de enero, pero hasta ahora no había obtenido el mandamiento judicial.