Pujol confirma que fue espiado por el Cesid

CARLES PASTOR ENVIADO ESPECIAL, Conteniendo apenas la ira, Jordi Pujol confirmó desde Washington la información publicada por EL PAÍS de que él y su familia habían sido espiados por el Cesid, el servicio de información español. ¿Tenía conocimiento de esto?, se le preguntó. "Veamos como [contesto]... Digamos que esta noticia podría ser cierta", respondió y añadió que no le había sorprendido. "Como pueden comprender, éste es un tema muy desagradable", dijo más tarde.

Fuentes de la Presidencia de la Generalitat confirmaron a este diario que los Mossos d'Esquadra (policía autonómica catalana) habían alertado a Pujol de que estaba siendo espiado por el Cesid, pero que el presidente catalán no había elevado una queja al Gobierno porque estaba tranquilo y confiado de que de esa investigación no podía salir nada negativo ni de él ni de sus hijos.Pasaban unos minutos de las 10.30 horas de la noche del martes (4.30 horas de la madrugada del miércoles en España) cuando Pujol leía en la sede del Banco Interamericano de Desarrollo un fax que reproducía lo que publicaba este diario. El presidente de la Generalitat acababa de asistir a una cena ofrecida por el presidente de esa entidad, el uruguayo Enrique Iglesias. La esposa de Pujol, Marta Ferrusola, asistía a la improvisada conferencia de prensa con rostro muy serio.

En 1993, cuando se producía la investigación del Cesid sobre Pujol y las actividades económicas de su familia, CiU ya colaboraba con el Gobierno del PSOE. "Sí, pero CiU colaboraba, no porque pensara que estas cosas no podían pasar, sino porque, y admito que algunos no se lo crean, creíamos que ése era el interés de España y Cataluña. Nosotros hemos sabido actuar estos dos años dejando de lado cualquier consideración que no fuera el interés del país", agregó Pujol.

"Como pueden comprender", dijo a continuación, "éste es un tema muy desagradable. No por razones políticas, sino porque hay gente que ha intentado la destrucción personal del adversario. O del no adversario, como sería este caso. Y así la política puede convertirse en un ejercicio de alto riesgo". Aún agregó, antes de asegurar que no tenía nada más que decir: "Resulta bastante penoso comprobar que esto ocurra, y hace falta mucha convicción para no tener una reacción que perjudique al país".

Intercambios

El presidente de la Generalitat abandonó ayer la capital federal norteamericana, rumbo a Miami, segunda etapa de su viaje, sin haber mantenido ningún contacto con el Gobierno estadounidense. Estos contactos no figuran ciertamente en el programa, pero medios de Washington aseguran que, cuando se preparó el viaje, la embajada de España trató de concertar un encuentro de Pujol con el vicepresidente norteamericano que no fue posible por cuestiones de agenda de éste. Hace unos meses, el influyente lobby vasco sí logró que el lehendakari Ardanza fuera recibido en la Casablanca. Fuentes de la Generalitat precisaron ayer que, en cualquier caso, debió ser una iniciativa de la embajada, porque Pujol en, ningún momento quería que este viaje tuviera contenido político.

El presidente de la Generalitat y el gobernador de Florida, Lawton Chiles, firmaron ayer en Tallahassee, la capital de este estado, un acuerdo de cooperación para intensificar los contactos en el terreno empresarial y comercial, promover los intercambios tecnológicos, ayudar a materializar proyectos en el ámbito cultural, de la enseñanza y el deporte, y fortalecer la cooperación mediante la promoción de relaciones entre las autoridades y las instituciones públicas y privadas de Florida y Cataluña. Para desarrollar y alcanzar estos objetivos se ha creado una comisión conjunta de cooperación.

Este acuerdo, más la confirmación de que la revista Fortune, del grupo Time, ha escogido Barcelona como sede de su segundo Foro Global, en junio de 1996, es la primera concreción que se obtiene del viaje.

Si las actividades en Washington iban encaminadas a captar inversiones para Cataluña y a transmitir el mensaje de que la crisis política española no perjudica su futuro económico, en Florida se trata de proyectar los negocios de empresas catalanas.