Dificultades de Iberia para que Bruselas le autorice ayudas superiores a 48.000 millones de pesetas

La Comisión Europea sólo ha dado su visto bueno, hasta ahora, a una pequeña parte de las ayudas que Teneo debe inyectar a Iberia: 48.000 millones de pesetas, menos del 40% de los 130.000 millones solicitados. La financiación que ya cuenta con el beneplácito del ejecutivo comunitario corresponde a los capítulos social y de renovación de la flota, pero la consecución de los restantes 82.000 millones se presenta extraordinariamente difícil. La negociación se reanuda hoy, tras un mes exacto de interrupción."En los capítulos de personal y renovación de la flota ya hay acuerdo, pero en el resto, el forcejeo era encarnizado", resumen fuentes de la negociación. El plan social asciende a 35.000 millones de pesetas, destinados a financiar las jubilaciones anticipadas y bajas incentivadas para 3.500 trabajadores. De los restantes 95.000 millones, sólo 13.000 millones cuentan con el beneplácito comunitario, el correspondiente a la renovación de la flota. Esta partida se justificaría por la mayor dureza relativa de la recesión en España. Y se empleará en hacerse con los nuevos A-340 que sutituirán a los DC-10.

Queda pendiente, pues, un paquete de 82.000 millones, consignados en el plan de viabilidad al objeto de minorar la pesada carga financiera de Iberia. Cuando el pasado 11 de agosto se suspendieron las conversaciones, los técnicos de Bruselas se mostraban muy duros. Por eso los negociadores españoles se avinieron a una pausa, hasta hoy, a la espera de una mayor flexibilidad de sus interlocutores. Mientras, han criticado el informe de la consultora porque según ellos expresa "opiniones sin estar sustentadas en datos objetivos". De los argumentos esgrimidos por Teneo/Iberia como excepciones a la regla comunitaria de la "ayuda por una sola vez" (Iberia gozó de 120.000 de millones de ayuda pública en 1992), sólo la mayor profundidad de la crisis en España ha impresionado a sus interlocutores. Pero les han dejado fríos las alegaciones sobre la "imprevisible" devaluación de la peseta, el adelanto de la liberalización aérea en el mercado doméstico y la unilateral modificación de las condiciones de privatización por el Gobierno argentino. La Comisión sigue convencida de que el apoyo de Teneo a Iberia constituye una ayuda de Estado incompatible con las reglas de la competencia de la UE. Los negociadores españoles harán llegar próximamente al ejecutivo comunitario sus alegaciones al informe de la consultora. Si logran retoques sustanciales, lo pactarían. Si no, el Gobierno reanudará su tarea de lobby sobre la Comisión.